Clases de Manejo de Hachas... técnica Ancestral [libre]

Howard sabía muchas técnicas de blandir un hacha, sobre todo los brutales e invencibles movimientos desarrollados por los gigantes del hielo, habitantes de Niflheim, sus tierras... Por eso decidió que de alguna manera ayudaría al resto enseñándole las técnicas y movimientos que él sabía, cualquiera que quisiera aprender lo podía hacer, era un arma entre comillas simple de usar, lo único que ser requería era tener la capacidad de ejercer una gran fuerza para poder mantener el hacha en alto, aunque eso también se podía arreglar con el entrenamiento...

Se había logrado conseguir un lugarcito (no era chico, lo que pasa es que estaba en un lugar apartado, y lo suficientemente a la vista como para que sólo los interesados se acercaran...) para abrir su pequeña academia de uso y manejo de Hachas...

Además de enseñarle a sus alumnos como controlar el hacha, debía enseñarles como controlar sus sentimientos en una pelea, cosa fundamental para conseguir un rendimiento optimo y un descenlace esperado por uno, o sea la victoria, eso porque si se descontrolaba podía llevar a malas experiencias y finales... Y le servía a él como manera de descargar el ardiente deseo de su cuerpo por destrozar y matar a quien se le plantara adelante...

Como aún estaba sólo decidió 'calentar' (bastante irónico para un híbrido de gigante de hielo xD...) para tal fin comenzó simplemente blandiendo su hacha como si fuera un látigo, lo hacía tan rápido que llegaba a cortar el aire y generar un vacío, esta técnica era personal, y la había desarrollado tras años de entrenamiento, aunque cualquiera que quisiera aprenderla podía hacerlo, tan sólo debía perseverar...

Chris llevaba un tiempo pensándolo (mucho tiempo a decir verdad). Hace unos días en una “serena” conversación con su madre mientras bebían té, Cheshire le grito que cuando el creciera debía ser un pirata, y no cualquier pirata, un pirata mil millones de trillones de chorrocientos mil veces infinitas mejor que su abuelito Arthur. Le dio justificaciones que consideró incoherentes, exceptuando la mención de su territorio. El representaba el mar de lágrimas, y según su madre, debería sacarle provecho (en especial por que era de los pocos felinos que no le tenía miedo al agua) y que la mejor forma de hacerlo, era siendo un pirata. A Chris no le agrado mucho la idea, ya que tenia una mala visión de los piratas, creía que a todos estaban casi desdentados y los pocos dientes que Lucian eran de oro (que a su opinión se veía espantoso) o tenían un color opaco amarillento por falta de aseo, mal arreglados, sucios, vocabulario poco decente y para empeorar la situación, los tipos robaban y eran muy violentos, aunque, si había algo, lo único que le podría llegar a agradar de los piratas, eran los sombreros…Le parecían lindos.
El como caballero que es, se negaba rotundamente a ser un pirata... Pero se lo pedía su madre, más bien dicho, lo obligaba su madre a tomar ese camino, así que ya que, no tenía más opciones.

Había hecho un listado con las cosas que debía hacer para cuando fuera pirata, su tripulación fue lo que logro conseguir mas rápido, casi todos los habitantes de su territorio lo apoyaban, aun que se tratara solo de ratoncitos, aves y animales pequeños. De quien recibió mas apoyo fue de su dodo Guillermo el conquistador, quien deseaba rememorar sus días en el mar.

Lo que seguía en su lista era la ropa que debía usar, otro asunto que pudo arreglar muy rápido gracias a su amigo el dodo.

Lo último era el manejo de armas, idealmente debería ser el uso de la espada o una pistola, pero no encontraba a nadie que supiera de su uso, su mami solo tenía unas enormes garras y una pistola que rara vez sacaba y su hermano una Oz. No podía aprender nada de ellos si el lo único que quería saber era usar una espada o una pistola.
Decidió salir de Wonderland para buscar a alguien que pudiera enseñarle…Lo único que pudo encontrar en poco tiempo fue unas clases de manejo de hacha. Miro durante largo tiempo al que parecía ser el profesor, estaba practicando con el hacha, aun que se intimido un poco en su manera de hacerlo, le dio la sensación de que era un bárbaro o algo por el estilo.

-N-no tengo nada que perder- dijo a si mismo en voz baja y acercándose tímidamente al gigante, tal vez el hacha no estaba en su lista, pero aprender a usarla podría ayudarle en algún futuro no muy distante.
-Excuseme…¿es usted quien da las clases?- dijo casi yéndose hacia atrás al levantar tanto la mirada para intentar ver bien al gigante de hielo.

Vio a Chris entrar y observarlo practicar un rato, se había enterado por sus informantes mágicos que debía seguir un camino que no le gustaba, aparte no vestía como era normal, sino como un pirata, o sea, un piratita...

- Oh!, claro, yo doy las clases... veo que quieres ser un pirata... creo que este tipo de hacha te servirá más para ese camino- al decir esto le entregaba un hacha de mango corto y de un solo filo, plana en la parte de arriba casi como las Vikingas, parecía una L, donde la parte de abajo era el filo que bajaba hacia el mango dando una curva no muy pronunciada... Howard sabía muy bien de lo que eran capaces esas hachas en buenas manos, aunque eran livianas y 'fáciles' de usar, pero no era tan así el asunto, esas hachas podían llegar a ser usadas hasta como boomerangs corta cabezas, eran potencialmente muy peligrosas...

- Lo primero que debes saber que un hacha es un arma para masacrar a tu oponente, un usuario de hacha no busca dañar, sino matar en la menor cantidad de golpes... Para eso tienes que tener confianza en ti mismo, y en tu hacha, es como si fuera una parte de ti, me entiendes?... es como si fuera una hija tuya, como si fueras tú en forma de arma, debes cuidarla como cuidarías a tu vida...- esto lo decía con toda la pasión del mundo, sabía muy bien lo que significaba para un gigante perder su hacha, era como cortarle un brazo, una pierna, y dejarlo desvalido a la interperie, a su suerte, sin ningún medio para subsistir, las hachas les servían para cazar, para divertirse, para todo en la vida, un gigante sin su hacha, no era un gigante, era un muerto... - debes sentir que sin tu hacha, estás muerto, así aprenderás a blandir el hacha como ningún otro lo ha hecho...- Dicho esto le enseñó las posturas básicas para pelear con hacha, lo primero era bajar su centro de gravedad, cosa que le daba mayor equilibrio...

Se aburia mucho , y de repente vio un anuncio donde anunciava k davan clases para manejar achas, no le vendria mal aprender a usar alguna arma~~

se dirijio hacia dicho lugar.

Estro en el lugar con una sonorosa entrada.

-Aki llego el Gran Corea de Sur -daze!!! denme un acha y are maravillas-daze!!

decia todo confiado y con aires de grandeza.
Se fijo k habia dos personas hablando, y una de ellas con una gran hacha.