¡Comic Market en Japón! [privado]

Japón era hermoso, realmente hermoso y las pocas veces en que había podido viajar a este país lo había echo con sus jefes y en visitas de estado, aburridas y formales.

Pero ahora era libre, vacaciones, dios, en los veinte y tatos años de democracia de su país no se había podido tomar vacaciones todo por estar ayudando a los gobernantes en su trabajo y ¡vamos! Se suponía que Manuel, su hermano, la representación del país, tenia que hacer ese trabajo pero el muy pillo simplemente se lo pasaba de viaje en viaje o muy estresado y le caía a él, la representación de la capital, lidiar con los problemas de estado. Suerte que su nuevo jefe era mas consciente que los anteriores y le ofreció, después de verlo con ojeras y medio dormido parado, una par de semanas libres.
E Inalef casi grito de alegría, podía ir a donde fuera, podría salir con quien quisiera, ahh... solo que no se le ocurría nada, tenia algunas relaciones ligeramente amistosas con las representaciones de algunos países pero con nadie, excepto Matthew, tan profundas. Necesitaba mas vida social.

Se encerró en su casa y reviso que es lo que podía hacer, tenia libros, películas, videojuegos, revistas y... anime, el gran invento de Kiku, el chico representante de Japón. Recordó lo que le gustaba ese país, las ganas que tenia de conocerlo con libertad y... las enormes convenciones de anime que se hacían allá.

sin dudarlo tomo el teléfono y llamo al chico de ojos pacíficos avisándole que iría de vacaciones a su país, el joven amablemente le ofreció guiarlo y en cuanto menciono que le gustaría ir a una reunión de anime la cosa se encendió, Inalef jamas pensó escuchar hablar al otro con tal entusiasmo. al final quedaron de juntarse en una estación de metro de la ciudad.
El chileno busco un cosplay, algo sencillo pero que fuera cool, busco cientos de personajes con los que se sintiera identificado y al final eligió a Izaya Orihara, no sabia por que, pero se veía muy parecido a él mismo.
Llego a la estación y vio al chico japones vestido como Yagami Light, aquel traje le quedaba sensacional. le hizo una seña con la mano para darse a notar.

- Eh! Kiku, Aquí estoy.- la cantidad de gente en la estación del metro era aplastante, comparado, el subterráneo de su país estaba vació incluso en las horas puntas.

Osea, que el amo y rey de los cosplay le hiciera ese cumplido era demasiado incluso para el nada timido Inalef, asi que un sonrojo ataco sus mejillas.

- Pues... pues, muchas gracias.- lo quedo mirando un tanto sorprendido, en las visitas de estado anteriores siempre lo había vistos bastante serio y formal, incluso demasiado serio para su gusto, pero ahora se veía radiante, totalmente diferente al chico país, al principio, a pesar de su entusiasmo, el chileno estaba nervioso por juntarse con él pero ahora se sentía mucho mas relajado, al parecer Kiku también tenia una faceta mas libre... no podría haber sobrevivido al lado de alguien tan tieso.- Un tanto mareado con tanta gente, nunca mas que quejare de mi ciudad.- sonríe.- pues bien, ¿para donde tenemos que ir? - suerte que el japones lo guiaría, si no Inalef estaba seguro que pasaría semanas perdido en el enorme metro de Tokio.

- ¡¿Que?! - se sorprende.- ¿en tu casa el metro tiene horario fijo? - con los problemas que tenia su subterráneo y que llevaban años intentado solucionar era impresionante que el asiático lo tuviera tan bien organizado.- después tienes que ayudarme con eso por favor, mi metro es un caos.

Se subieron a uno de los vagones del tren subterráneo, al parecer el evento iba a ser muy concurrido por que vio a varios chicos y chicas cosplayando en el tren, le recodaba los humildes eventos que se hacían en su casa.

- Sabes, los jóvenes en mi país igual organizan eventos de anime, tu cultura y tu idioma pego muy fuerte allá, pero son mucho mas humildes.- el tren era silencioso y muy rápido, muy agradable.- he visto vídeos de tus convenciones y son espectaculares, por eso me anime tanto a venir.- sonrió mientras las estaciones pasaban una tras otra.- en verdad tenia que conocer como era un evento en grande para luego organizar algo en mi casa, si me resulta... ¿Te animarías a ir?

Invitar al padre de la animación a uno de sus eventos podría ser catastofico pero el chico le agradaba mucho y quería que fuera a su casa y opinara sobre lo que allí hacían.

- ¿Falta mucho para llegar?- se sentía ansioso, ya quería esta allí.

- Muchisimas gracias Kiku.- respondió emocionado.- en cuanto regrese le diré a mis jefes para que escuchen tus sugerencias.

Tras escuchar que el japones aceptaba asistir a una de las convenciones de anime de su país se puso a pensar en cual seria la mejor, el otaku-fest o el cosplay-fest podrían ser buenas ideas o tal vez la otakuton, para que viera que los jóvenes chilenos eran solidarios y utilizaban su pasión para ayudar a los mas necesitados, lo que tendría que hacer era ponerse en contacto con los organizadores de los eventos para procurar que fueran los mejores.

- ¡Genial! - exclamo cuando le aviso de que en esa estación se bajaban, ver tantos y tan buenos cosplay tan solo en el vagón del tren lo tenia muy entusiasmado, se sentía increíblemente joven pero le daba igual, estaba que tomaba del brazo al japones para que corrieran al evento. En vez de eso se mostró lo mas civilizado que pudo.

El lugar del evento era enorme, Inalef quedo sorprendido, mas parecía un estadio o los lugares que en su casa usaban para los grandes conciertos musicales, nunca para un evento como este.

- ¡Guau! Este sitio en increíble Kiku.- mira para todos lados impresionado.- es.... enorme.- cientos, no, miles de chicos y chicas acudían al lugar vestidos con los trajes mas perfectamente creados, el chileno se sintio un poco fuera de lugar, su traje era tan sencillo.- ya... ¿entramos...? - pregunto un tanto cohibido

Prácticamente ni tomó en cuenta las recomendaciones que tan seriamente le indicaba el japones, estar allí lo tenia sobreexcitado y ya quería entrar y recorrer.
- Esta bien, no le sacare fotografías a nadie que no quiera y no correré ni nada de eso.- lo mira.- gracias por esto.- revisa los catálogos aunque no entendía ni una letra, excepto lo que estaba en ingles.- Me comportare lo mejor posible.- dijo esto ultimo con una infantil sonrisa, miro su reloj.- lo bueno es que los orientales son puntuales, allá en mi país igual hay que esperar para que las cosas empiecen...
Miro para los lados y vio un grupo de cosplayers de Bleach.

- Oh, genial... - dijo impresionado, en verdad le parecía estar viendo a la personificaciones reales de los personajes.- los cosplay japoneses son siempre tan increíbles.- moría por sacarles una fotografía y mostrárselas a todos en su país.- Kiku, ¿Tu crees que ellos nos dejarían tomarles unas fotografías? Es que son tan buenos y eso... - cruzaba los dedos para que el chico se compadeciera de él y le ayudara a conseguir las mejores tomas de todos los cosplays del evento.

Se fue detrás del japones ilusionado, Kiku debía de tener sus metidos para convencer a sus ciudadanos, ah, la sorpresa que se llevarían sus compañeros otakus en Chile una vez le mostrara todo lo que obtuvo en Japón.
Vio al otro muchacho hablar en su idioma con los jóvenes disfrazados y estos asentían animados, Inalef apenas pudo reprimir un jadeo emocionado al entender que tenia la autorización para acercarse y sacar las foto que quisiera.

- Muchas gracias. - dijo sacando su cámara.

Se despidió de los cosplayers en su idioma y siguió al japones ansioso, por fin entrarían al gran salón y vería las diferencias entre un evento japones y uno humildemente chileno.

- Por supuesto. - le dijo poniéndose a su altura. Se acercaron a la puerta y Kiku se encargo de conversar con los encargados, mientras tanto Inalef se volvía loco mirando cada poster, figurita y persona que caminaba por el lugar.

- ¡Gua! Todo es tan genial. - exclamaba deseando poder tener el permiso para fotografiarlo todo.

Eso era verdad, su manejo del japones, a pesas de que era un idioma que le encantaba, era bastante menos que básico.

- Llévame donde tu quieras, mejor me dejo guiar por ti. - confiaba en su compañero y si alguien sabia que era lo mejor del evento era él.- lastima que no logre entender por completo tu idioma, seria genial ir a las mesas de conversación. - era un poco decepcionante pero al menos le serviría para tomar la determinación de ponerse a estudiar japones, cosa que siempre relegaba debido a sus múltiples responsabilidades.

- Eso seria estupendo Kiku. - la idea de unas clases de japones en la comodidad de su casa animaba a cualquiera, quizás durante las vacaciones podría pedirle al chico que lo hiciera, eso si le quedaba tiempo. Por que gastaría el máximo posible estando con Mattie.- muchas gracias por ofrecerlo.

Doujinshis, eso era lo mejor, varias de sus conocidas en el circulo otaku de su país, al saber que iría a tamaño evento, le dieron listas de los doujinshis que buscaban.

- Ah, supieras la de encargos que tengo. - se rasco la cabeza.- todas mis amigas y sus amigas me hicieron encargos de doujinshis yaoi, solo yaoi... ahhh. - suspiro.- son todas tan especiales. - llegaron a una amplia hilera de mesas idénticas donde las dibujantes ofrecían sus productos, Inalef esperaba poder cargar con todos los librillos que, sabia, tendría que cargar.

Saca un largo papel y se pone a revisar.

- A ver... tengo que llevar de Naruto, Drrr, Magi, Slamp Dunk y muuuchos otros.- le muestra la interminable lista.- ah y de una serie extraña... Hetalia o algo así... - se encogió de hombros.- no tengo tanto tiempo como para verlas todas.
Se acerco al primer stand sin notar el rubor en el rostro de Kiku, demasiado preocupado por la cantidad de cosas que debería comprar.

- A ver... - tomo uno de los libritos de la mesa para verlo, de inmediato reconoció la silueta de Izaya en la portada.- ah... creo que este lo comprare... tengo encargos especiales de doujinshis donde salga Izaya.

Seguía revisando los mesones llenos de historietas dibujadas por fans y se maravillaba cada vez que veía algo particularmente bueno, algunas de esas personas merecían mucho ser profesionales.

- Oh vaya, este esta tan bien dibujado. - aunque no tenia ni idea de lo que decían le encantaba mirarlo y ya quería abrirlos, lastima que la gran mayoría tenia que entregarlos.- ¿eh? .- tomo de la mesa uno en cuya portada se veía un hombre vestido de rojo, de pelo largo y atado en una coleta que le era demasiado familiar.- ¿Donde he visto a esta persona antes? - se pregunto mientras miraba la contraportada también.- es de Hetalia...

Seguía pensando que conocía a esa persona, pero entre tanto anime, tanto cosplay y tanto manga no podía estar seguro, lo único que si hizo fue pagar por el doujinshi y echarlo a la bolsa, ya después se lo conseguiría para verlo.

- Al menos ya llevo algunos, seguiré comprando mañana mejor.- le dijo al japones.- hay muchas cosas que ver todavía.- miro para todos lados un tanto confundido por lo enorme del lugar.- ¿Donde me aconsejas ir ahora?

La verdad era que con tantas emociones le estaba entrando hambre pero él no conocía las costumbres de los horarios de comidas en ese país y no quería cometer algún error preguntando por algún lugar en donde pudiera comer.

Se sintió aliviado de que Inalef no pareciera haber descubierto de qué trata aquella serie, suspiró, sintiendo como parte de los nervios abandonaban su cuerpo.

Miró el reloj, todavía quedaba media hora para la hora del almuerzo. - ¿Qué le parece si paseamos un rato por el lugar, para que se vaya familiarizando un poco con él, y luego vamos a comer? Hay mucho por ver, pero si nos organizamos bien, lograremos verlo todo en estos tres días. Oh, una vez estemos sentados, podremos decidir dónde ir a continuación. - Miró a su alrededor, poco a poco el sitio se iba llenando de gente, con cosplay o sin él, a ese paso pronto iba a estar en su máxima capacidad. - Tal vez debamos darnos un poco de prisa, o de lo contrario no encontraremos una mesa y tendremos que ir afuera para almorzar... - Comenzó a divagar en voz alta -.