Cambiando de look [privado]

Como a el tico le encantaba siempre lucir muy bien, además que era para él una diversión muy grande el comprar ropa, zapatos y en fin, ese tipo de cosas, decidió ir hacia las tiendas para hacer un cambio de guardaropa, y quien sabe? talvez decidiera cortarse el cabello o hacerse otro tipo de peinado.

Tomó todo el dinero que tení ahorrado y otro tanto del "chanchito" de su hermano, que de todos modos no se daría cuenta, y salió de su casa rumbo a dicho lugar, muy entusisamado y pensando en el tipo de ropa que le quedaría bien. Al llegar allí buscó la tienda que se notara que vendían ropa de buena calidad y entró en ella. En ese lugar se especializaban en ropa masculina para todas las edades, así que había muchísimo de dónde escoger.

Así que decidió primero dar un vistazo a toda la ropa que allí se ofrecía, y luego se decidiría por probarse algunas prendas que le gustaran. De modo que el tico se paseaba con una enorme sonrisa por los pasillos del amplio establecimiento, mirando todos los estilos de camisas,camisetas, pantalones, chaquetas, shorts, chalecos, etc, todo lo que vendían es ese "maravilloso"lugar.

Maldijo el día que los dioses lo habían hecho tan pequeño…

Allí estaba Ezio, de más o menos un metro y medio de altura, mirando un estante alto donde estaban los sombreros de la tienda, se preguntaba, ¿en qué demonios pensaban los encargados al poner los sombreros tan altos? Y para empezar, ¿dónde en el mundo estaban los encargados de la tienda?.

Sabía que eso de huir de la iglesia y renegar de los dioses romanos había sido mala idea estaba condenado a ser bajo de por vida. Suspiró exasperado mirando el estante y se estiró un poco, nada, intentó saltar un poco pero solo consiguió caerse. Se levantó arreglo sus ropa y se dispuso a irse resignado hasta que se topó con alguien que, si bien no parecía ser el encargado podría ayudarle.

-“Disculpe…”- comenzó a decir suavemente para llamar su atención.

XD esta es una historia real DX en algunas tiendas ponen los sombreros demasiado altos y tengo que dar saltos pa llegarles XDDDD. Por cierto yo no sé que tamaño tiene San José pero intuyo que más alto que San marino es :D.

Continuaba observando entusiasmado todos y cada uno de los estantes de la tienda, no quería dejar pasar por alto alguna prenda que fuera de su agrado, así que continuó esculcando por aquí y por allá, memorizando los pasillos y ubicación de las prendas que le llamaban la atención para luego tomarlas todas y probárselas a fin de decidir cuales de ellas comprar.

En esa divertida labor se encontraba hasta que fué traído a la realidad por un joven que intentaba llamar su atención.

-Que es lo que quieres?- contestó un poco brusco.

(xDD sí mide 1.65m jeje, leí que Ezio mide 1.60m así que no es mucha la diferencia)

no no, sí lo es...X_X yo sé que suena a tontería...XDD anyway..entonces Ezio le debe llegar como a la frente? XD

Ezio se contuvo de mandarle al diablo, bueno de todas maneras él era quien estaba interrumpiendolo, le miró y notó que no era demasiado alto pero quizás el tenía los centimetros que necesitaba Ezio para halar el sombrero por el ala y sacarlo del estante.

-"quería pedirle por favor, si es tan amable de alcanzarme ese sombrero azul arriba del estante.."- dijo lentamente -"porque desafortunadamente no encuentro a ningún encargado de la tienda..."



ya estaba, ahora solo conseguía su sombrero, pagaría y terminaría con el latoso día.

(xDD pos si! mas enanos los dos!! 8'DUu)

Observó fijamente al chico, luego volteó a ver el sombrero del cual le hablaba. A pesar de ser costarricense, suponiendo que debería de ser siempre cordial y amable, de seguro él era la excepción a la gente de su país, estuvo a punto de decirle que no lo molestara y que él no era su empleado para estar haciendo las cosas por él, pero, ese día estando en aquella tienda lo tenían de muy buen humor.

-Así que el enanito no alcanza el sombrerito?!! ja ja ja- se burló muy divertido, a pesar de su buen humor no podía evitar sus aires de superioridad.

-Bien, te ayudaré...- se dirigió hasta la parte bajo el sombrero e intentó alcanzarlo, pero no pudo. Volteó a ver al otro con la esperanza de que no le devolviera la broma y se estiró lo más que pudo, poniéndose de puntitas a más no poder, y con bastante esfuerzo logró tomar la punta del ala del sombrero.

-Aquí tienes enano!! ja ja ja- no le dió tiempo de burlarse lo suficiente porque no solo había alcanzado ese sombrero, si no que por accidente había logrado que muchos otros de los que se encontraban alrededor de ese, calleran tambien.

(D:! perdón por tardar tanto en responder por cierto ñ.ñUu)

-"....vaya, pero que amable eres...no tenías que bajarme TODOS los sombreros del mostrador" -dijo alzando una ceja en tono irónico, tomando el sombrero entre sus manos –“Grazie..” –dijo secamente y luego tomó uno de los sombreros del piso y, alzándose un poco cerca del estante coloco el primero casi lanzándolo sobre este –“….tsk..”- murmuró entre dientes y comenzó a recoger el segundo, no esperaba que el “mayor” le ayudase a recoger el desastre que había ocasionado pero tampoco tenía que seguir soportando sus ironías y burlas.

Lo miró de manera reprobatoria, en cuanto el otro se puso a recoger los sombreros, el tico decidió que podía irse y que el otro limpiara su desastre, de todos modos no tenía la culpa, además que recogiera el otro como pago por haberle ayudado.

Ya estaba dando un paso para irse, cuando pensó en que alguien pudo haber visto que fué él quien tiró los sombreros, y si lo acusaban con alguno de los encargados, podrían regañarlo o no dejarlo comprar, así que en lugar de irse se agachó y tomó varios sombreros para intentar colocarlos de nuevo en su lugar.

-Entonces, usas sombrero para verte más alto? jaja - comentó nuevamente en tono burlón.

-"oh bueno, non... en realidad es porque me gusta..." -Dijo irónico -“pero tu deberías usar uno, quizás te haga ver más inteligente…”- dijo dejando el último sombrero en la repisa y mirándolo de reojo con el ceño fruncido, ¿por qué le seguia molestando?. -"es tu costumbre molestar a extraños o ¿es que no estas acostumbrado a que alguien te pida favor?"- hizo una pausa, como acordándose de algo -"quizas el sombrero te haga ver también más educado..."- comenzó a retirarse -"cómprate uno de niño…probablemente ese es el tamaño de tu cabeza…”

X_X omg Izu...XD se van a odiaaaar nooooo..*correteaa*

(xDD nah, esperate nada mas a que aparezca la oportunidad de que no se odien xD, mira que en otro tema Jo le pateó la entrepierna al otro pjk y terminaron hechos un amor de amistad xD)

Escuchó todo aquello sin decir nada, pero frunciendo el ceño con cada comentario, el buen humor que tenía poco a poco iba desapareciendo, siendo reemplazado por enojo.

-Dí lo que quieras! bien sabes que solo me dices eso para disimular el hecho de que no eres más que un enano!!- le dijo en cuanto el otro comenzó a retirarse, y si no fuese por el último comentario, lo hubiese dejado marchar.

-Niño?!! jajaja! y tú con esa altura cuantos años puedes tener?!!- dijo burlón pero con evidente molestia, mientras se posicionaba frente al joven para no dejarlo continuar.


(Dx perdón por mis post de mierda! T.T)

Frunció el ceño y le miro visiblemente irritado -"no importa la edad, es evidente que por la madurez mental que muestras no debes llegar a tener si quiera la madurez mental de un niño de 12 años..."- dijo torciendo una mueca, que pretendía ser una sonrisa burlona pero la molestía que tenía no le dejaba.

-"y solo porque sea de baja estatura no significa que no sea mayor que usted..."- dijo fulminante y siguió caminando -"tengo dos decadas encima..." -dijo cuando pretendía retirarse XD nuevamente.

pero de que hablas..T-T si tus post estan geniales...a mi me preocupa que Ezio sea muy amargadón...x3 espero que lleguen a llevarse bien....DX...sin ofender xicos pero creo que son unos niños los dos...

Ezio: "¡no soy un niño!"

vale vale..como digas...U_U

Al escuchar semejante revelación, no pudo evitar soltar la carcajada, riéndo escandalosamente por bastante rato, sin poder articular palabra alguna, su rostro comenzaba a enrojecerse y de sus ojos brotaban pequeñas lagrimitas que se escapaban traviesas rodando por sus mejillas de cuando en cuando.

Hubo de respirar profundamente para calmarse antes de poder hablar.

-Eres cuatro años mayor que yo, y tienes esa estatura!! esto es.... épico!!- exclamó aún burlándose a más no poder del otro.

-Es que simplemente no puedo creerlo!! que no te dieron de comer cuando eras pequeño o algo así?- como si no hubiese sido suficiente burla ya, continuó molestándolo.

(xD, este es amargadísimo y orgulloso, pero siempre termina cediendo,. ya verás ;D)(x'D y sí, al menos Jo es un inmaduro de primera jaja)

-“....supongo que a pesar de no haber compensando mi alimentación para que creciera si lo hicieron con mi educación porque por lo que veo careces de ella…” – dijo entre dientes con ganas de asesinarlo, aunque se contuvo, no quería hacer nada estúpido, solo quería comprar su sombrero y marcharse de ese lugar de una vez por todas.

-“Así como tu pasatiempo que es de muy mal gusto…¿no tienes algo mejor que hacer además de molestar?”- refunfuño –“ mi tamaño está bien, la gente podría confundirme con alguien joven pero no por un mocoso impertinente…”-
Siguió su camino, Dios quiera que dejara de molestarle, después de esto no compraría más sombreros en un año, en una década!...quizás debería ordenar por internet …

Cada vez se ponía más divertida la situación, el tipo se enfadaba mucho y eso era algo regocijante para el tico, de modo que al escuchar sus comentarios, no le afectaron en lo más mínimo, y también continuó siguiendo al mayor cuando este intentaba marcharse nuevamente.

-Pero con esa estatura debes de estar más que acostumbrado a que te molesten, no me creería ni en un millón de años que yo soy el primero que bromea con eso jaja- le dijo igualmente de manera burlona.

-Así que no veo el motivo por el cual debas enojarte..- agregó al final, esbozando su media sonrisita arrogante.

El rostro de Ezio se había tornado ligeramente rojo pero de la rabia, mientras seguía caminando fútilmente puesto que el menor le seguía a donde iba, respiró exasperado y miró a otro lado –“…sí, ya me han molestado antes..ja ja…que gracioso mira..encontraste un enano…¡ahora vas a dejar de molestarme?!”- terminó girándose al “menor” preguntándole lo último en voz alta, colérico –“¡has de ser una persona con muchísimos complejos si simplemente disfrutas molestar a alguien sin siquiera conocerlo! ! ¡Descarga tus problemas emocionales con alguien más! –se volteo –“yo no soy un bufón para entretenerte, mocoso”

Se fue rápidamente del sitio al darse cuenta que había casi gritado en un espacio publico, agradeía lo grande de la tienda y la musica del fondo puesto que no habia hecho demasiado escándalo, salvo para el gerente que comenzaría a verlo con cara de odio si lo hacía de nuevo y no compraba nada. Fue hasta la caja, cabizbajo pagó el sombrero, sintiéndose morir de la vergüenza.

Escuchó atentamente todo el regaño por parte del mayor, pero realmente estaba ya de muy buen humor para que eso le afectara,y se limitó a seguir riéndo, por lo cual no se percató cuando el otro salió rápidamente y se dispuso a pagar el dichoso sombrero en el área de cajas. Talvez, solo talvez, había sido un poco inmaduro y malo después de todo, así que decidió era mejor intentar arreglar las cosas con el tipo.

Se dirigió hacia el área de cajas y lo alcanzó tomándolo por el hombro.

-Oye!, espera!!- le dijo con voz firme.
-Sabes, me has caído muy bien después de todo, así que quisiera que hiciéramos las pases!!- dijo entonces mostrándo media sonrisita, que esta vez no era tan forzada como de costumbre, puesto que estaba bastante alegre a causa de lo mucho que se divirtió con el tipo.

-Así que he decidido que serás mi amigo!!- concluyó, no hacía una petición de amistad, si no más bien lo afirmaba como un hecho.

Ezio se giró lentamente y miró al “menor”, parpadeando algo confundido al principio y después frunciendo el ceño en un gesto que parecía ser más bien de indignación. –“no hagas una conclusión tan apresurada…”- se salió suavemente del agarre y caminó al área de las cajas –“yo no sería amigo de alguien que me usa como juglar personal o bufón de corte…”- dijo encogiéndose de hombros –“y no se me ocurre nada que puedas hacer para saldar “las paces”- dijo mirándolo de reojo, claramente aún ofendido, al parecer el mayor era algo resentido.

Ezio caminó lentamente a la salida suspirando, había sido una larga estadía dentro de esa tienda, pensaba que quizás saldría de allí al centro comercial a comerse un rol de canela.

El otro le rechazó rotundamente, pero no por eso se iba a rendir, de modo que decidió seguirlo cual acosador, hasta que el otro se resignara y aceptara la "valiosísima" amistad que le ofrecía.

-Bien...- fué lo único que dijo y comenzó a caminar con indiferencia al lado del mayor. Olvidando por completo el motivo por el cual se encontraba en esa tienda en primer lugar.

Ezio se giró lentamente, sin creerlo –“…¿bien?”- parpadeó confundido y le miró fijamente luego frunciendo visiblemente el ceño, indignado, al punto de que sus mejillas se colorearon de la rabia –“…yo no he dicho que seamos amigos…eres maleducado y ofensivo…”- replicó indignado aún caminando al lado de él, se detuvo en seco tratando de pensar en frio –“…¿qué es lo que quieres?” – pregunto, pensando que lo de la amistad probablemente tenía que ser una broma pasada –“…si te divertiste bastante ya…”- suspiró indignado, calmándose un poco.

Observó de manera divertida como el otro se sonrojaba de puro enojo, y sin decirle nada escuchaba sus reproches, tan solo mostrándo una sonrisita no amable pero tampoco burlona en su rostro.

-Ya sé que me dijiste que no, pero no me importa....- fué lo único que le dijo al parar junto con él en espera de que siguiera caminando para segurilo a donde fuera que se dirigía.

-“….pero aún no respondes que quieres…”- dijo suspirando exasperado y retomando su camino a una cafetería en el centro comercial, él no le arruinaría una tarde con un buen moccacino y un rol de canela con nata encima. No. Después de semejante tarde merecía algo muy dulce, al notar que le seguía persiguiendo le miró de reojo –“…¿Vas a seguirme todo el día, cierto?”- suspiró resignado-“bien…espero tomes café…”- camino resignado a la cafetería con su nuevo acompañante.

No le dió tiempo de contestarle ya que comenzó a caminar directo hacia una cafetería, de modo que el tico le siguió, siempre con esa divertida expresión en su rostro.

Entonces escuchó lo que el mayor le dijo y lo único que pudo pensar en ese momento,era que había ganado

-Café! me encanta el café, en mi país se produce uno de los mejores cafés del mundo!!- exclamó con orgullo y entonces continuó al lado del otro directo a la cafetería donde por lo que veía, entrarían a comer.

-“…sí, que bien…”- suspiró y pensó “eso explica lo hiperactivo”, aunque ya su tono no era tan arisco, estaba un poco más resignado, buscó una mesa donde sentarse y miró al otro –“¿cómo quieres el café?, ¿negro? O vas a pedir un mocca, un latte…¿un café ártico?”- quería que le dijese para ir a comprar todo y terminar todo el asunto, pensó algo confundido cómo era que había terminado invitándole un café al otro después de lo mucho que le molesto.

Suspiró y trato de no darle vueltas al asunto. debía ser la falta de azúcar su perdida de juicio.

Entraron a la cafetería y se sentaron en una mesa, luego el mayor le preguntó como quería su café. El castaño pensaba pagar él mismo su cuenta, pero como buen tico, donde escuchaba "gratis" no se podía rehusar, así que pensó en que eso sería un "bono extra" o algo por el estilo.

-Quiero un expresso!..y también un pedazo de pastel - pidió no como ruego sino con un tono de orden bastante marcado, mas sin embargo su rostro reflejaba una expresión bastante amigable, por primera vez en el día.

Ezio asintió y fue a pedir las cosas, al estar cerca de la caja medito que no le había preguntado que clase de pastel de los 6 tipos que tenían por lo que simplemente se dedico a mirar las tortas e intentó pensar en un sabor neutro antes de que el “chiquillo” empezará a quejarse.

Pidió un ponqué de vainilla, un rol de canela, un expreso y un moccachino y los llevó a la mesa donde se encontraba el chico, suspirando le dio su café y su postre y el también se sentó, de una pequeña taza con crema aplico un poco a su rol de canela y su mocca. Sonrió complacido; era la primera vez en la tarde que se le veía tan feliz y relajado.

-“provecho…” -dijo educadamente antes de beber un poco de su mocca.

El mayor fué obedientemente y regresó con una bandeja con el pedido de los dos, de verdad le divertía como comportarse de esa manera le beneficiaba, debería de ser más despreocupado de vez en cuando y menos amargado como la mayoría del tiempo, fué lo que pensó.

Endulzó rápidamente su café y probó un poco, realmente estaba fuerte como a él le gustaba.

-Oye! gracias por esto!!- le dijo mientras le sonreía abierta e involuntariamente esta vez.