Reunión Nórdica... o los que hay (para los nórdicos XD)

Veía en Finlandia una gran sonrisa, y en Noruega tambien, aunque costara mas; Él mismo se sentía tambien felíz, probablemente tampoco se notara tanto, pero a los 3 los emocionaba el acercarse una vez mas, y volver a lo que eran antes, en su universo de confianza, cariño, risas, y demas.

Escuchó la sugerencia de Mathias, ¿cocinar? pues, podía ser una experiencia agradable, y quien sabe, talvez les quede deliciosa la comida.

-'sta bien, p'ro sera comida n'ruega, ya que estamos en tu c'sa - Tenía un poco de curiosidad, y estaba seguro que Tino tambien así lo querría, ya que ambos conocían perfectamente su gastronomía, ambos comían muy seguido en casa del otro; Pero comida en Noruega sí sería algo que querrían intentar.

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Lo siento si mande a Ai a buscar alguna receta noruega xD....
Siiiii ya tendra Su-san a su hijo xD... y a alguien (Den) para pelear D:
Noruuuu tendra pareja :D... ahora te vas a sentir como yo me siento escribiendo el rol de "conocidos"

-Creo que muy pocas veces he comida de tu casa Noru-kun, quiero cocinar algo nuevo –dijo levantándose también, junto con el chico rubio de rizo flotante–Pero debes decirnos que hacer para que todo quede bien –sonrió y se acomodó la boina que estaba a punto de caérsele de la cabeza.

Se dirigió a la cocina siguiendo al otro chico. La verdad es que ya tenía hambre puesto que no le había dado tiempo de desayunar antes de ir a la reunión, y las galletas el café no podían con su hambre.

-Espero que la comida nos quede bien, moi moi~

Se adentró a la cocina no muy seguro acerca de que fuera lo que prepararían. Sabía muy bien que no debía ser algo muy radical a sus gustos por qué no lo comerían, tenía la ventaja de que al vivir cerca la cocina tenía cierta congruencia. Tomo un libro de cocina que reposaba, hasta el momento abandonado en una estantería acercándose al finlandés que le ayudaría, hojeando las hojas viendo las ilustraciones para ver si se decidían por algo. No podía ser algo que tardara mucho así que eso le ayudaba a elegir una opción.

-mm… puedo hacer estar recetas… ¿alguna que llame su atención?

Se detuvo al recordar que tenía rackfisk para acompañar podría ser con patatas, aunque estaría bien un buen entremés. Dejó el librito azul en manos del finlandés para ir a la alacena a revisar lo que tenía.

-tengo pescado… y eneldo, les gustaría comer arenque?

((gracias recetario de cocinas del mundo ;w; me ssalvó XD aunque al ultimo no me gistó como quedo el post XDD))

-Suena int'resante - No quiso decir delicioso porque sinceramente no tenía idea del sabor que tendría... Pero estaba dispuesto a probar algo nuevo, ademas de eso se trataba volver a acercarse, y si bien, los demas nórdicos no habían llegado, con ellos tres estaban complacidos.

-Me im'gino que us'remos ropa de c'cina... - Dijo esperando que le pudieran dar alguna gabacha o algo así, como sea, no le agradaba la idea de ponerse un delantal, pero ensuciar su ropa tampoco se veía atractivo.

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Noru dales delantales!!!! xD

-Oh crap!! ¡¡YA COMENZÓ NARUTO!! ¡¡Y HOY POR FIN TERMINABA EL RELLENO!!- Sealand gritaba al mismo tiempo que sus piernas se movían lo más rápido que podían, bajó los escalones y llegó al televisor, sin ver, tomó el control remoto, encendió el aparato y aún con el apuro que llevaba lo pasó al canal de TVtokyo y cuando llegó.... había terminado....

-BLOODY TV!!- exclamó antes de arrojar el control remoto a la dura pantalla de la televisión, para luego ver el suelo donde se encontraba el control del televisor con una triste y frustrada resignación de que tenía que recogerlo, ya que ver t.v. era lo único que podía hacer para pasar entretenido en un día como esos.

Lo recogió y pasó de canal en canal para ver si había algo interesante, luego se encontró en la sección de noticias, sin poner atención a lo que decían, siguió recorriendo los canales hasta que escuchó la palabra "nórdicos", se detuvo y puso su completo interés a lo que el hombre británico de las noticias decía...
Hablaba de cierta reunión de estos países que se albergaba en el país de Noruega, era una junta para mejorar los lazos que los países nórdicos tuvieron en el pasado... De pronto Peter pensó:
"¡Esta reunión debe ser asistida por "La estrella de mar" Sealand!, ya que para ser una gran potencia, ¡debo tener buenas relaciones con los demás países! Además que soy practicamente considerado un país nórdico"
Ignorando el hecho de que Sealand era solamente un viejo búnquer de Gran Bretaña, por las buenas relaciones que tenía con su padre, Suecia, Peter quería con todas sus ganas, pertenecer a la familia nórdica, él envidiaba a los pequeños niños ingleses que residían en su tierra, por las alegrías que sus propias familias les brindaban, y eso quería Peter; era por eso que siempre llamaba, con mucho entusiasmo, a Berwald, su papá; aunque no fue él quien lo engendró biológicamente, así lo consideraba el pequeño rubio, Finlandia su madre, a Dinamarca y a Noruega sus tíos o algo así y a Islandia como su hermano menor, (porque según Sea-kun, él tiene mas experiencia siendo un país XD).

Dejando su mente en claro, se dirigió la bañera velozmente, cuando terminó de bañarse, se colocó sus blancas y celestes ropas junto con su característico sombrero, el cual nunca se quitaba para que todo aquel que lo viese pasar, supiese que era “la gran nación de Sealand” de quien se trataba.

Llegó al pórtico de la casa de Noruega, tocó el timbre y esperó con anticipación.

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me vengo a meter >:D

hola a todas!!

-Si, suena bien -dijo mientras hojeaba el libro azul que Noruega le había dado, observando las recetas típicas de su casa, mientras esperaba que le dijeran que podía hacer.

Entonces escuchó el sonido del timbre.

-¿Quieres que vaya a abrir? -se ofreció.
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Hola :3

Berwald tenía razón, necesitaban ponerse lo adecuado para no mancharse la ropa (y tampoco quería terminar oliendo a pescado), así que se agachó en los cajones bajos buscando mandiles extras ya que a la vista solo estaba el que usaba con los colores de su bandera. Escuchó resonar el timbre y se le hizo raro que alguien llamara pero a falta de nórdicos (2 según él) supuso que alguno de ellos sería.

-por favor

Contestó a Finlandia mientras seguía rebuscando. Dio con lo que quería pero se quedó en su lugar un momento pensando si mostrárselos o no… es que eran tan… poco masculinos? Cómo llegaron ahí? Observó con detenimiento el mandil rosado con volantes y el otro con un gran dibujo de conejo que juraría él no tenía.

“Dinamarca”

Pensó ante el posible culpable pero como solo eran ellos no creyó que tuviesen problemas, a final de cuenta cumplirían su función.

-tengo estos

Dijo mostrándoselos al sueco mientras Finlandia abría la puerta dejándole la decisión de cual tomaría.

((su-san decide cual cada quien xDD))

Abrio los ojos hasta mas no poder. No podía creerlo, ¡¿Que clase de atuendos eran eso?!... Pensaba que por ser Noruega, no le gustarían las cosas así... Se llevó una gran sorpresa.

Se imaginó a sí mismo con ambos trajes, no le gustaba lo que imaginaba... No era su estilo para nada, no le daban... Seguía repitiendose este tipo de frases cuando cruzó por su mente que Tino tendría que usar el otro...
Finlandia... Con el traje rosado se veía lindo, le daba perfectamente... Y luego con el del conejito, tan adorable... Ambos le quedaban bien y se dio cuenta de eso con un sonrojo en sus mejillas.

Le gustaba mas como en su imaginación le quedaba al finés el conejito, tierno, dulce, delicado, "como él"...
-D'me el r'sado - Dijo mientras seguía imaginando, y al mismo tiempo se probaba el atuendo, pero luego, reparó en como se veía a sí mismo y la verguenza que podría estar pasando, por lo menos ahora solo era el noruego quien lo veía, probablemente los demas se reirían y el nuevo visitante tambien...
"¿Porqué no elegi el conejo?"
Pensó totalmente apenado. Por lo menos el delantal rosa era un poco mas grande que el otro.

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Pobre Su-san!!!!!

Dejó el libro en la mesa y se dirigió a abrir la puerta, esperando que fuera Islandia o Dinamarca quien tocaba, pero cuando abrió la puerta no encontró a quien esperaba.

-Hola Sea-kun, moi moi -saludó al menor, mientras le hacía espacio para entrar a la casa.

-¿Qué haces por aquí? -le preguntó mientras caminaba nuevamente a la cocina.

Cuando entró de nuevo vio a Suecia con un delantal rosa puesto y sosteniendo uno con un conejito, que supuso era para él. Su expresión cambió totalmente, más que nada porque nunca había visto a Berwald vestido así.

Cuando la puerta se abrió, vio a Finlandia salir de ella y Peter sin escuchar el saludo, dio un gran salto para quedar colgando fuertemente con sus brazos de la cintura del finlandés.

-¡Tiiiiino!- gritó, pero luego se dio cuenta de que no se estaba portando como un país "maduro y responsable" y según él, eso era lo que necesitaba la situación; lo soltó y dijo:

-I'm sorry,- limpió su garganta y dijo -he venido a esta importante reunión- Para sonar más "adulto".

-Excuse me- avanzó hacia adentro de la casa y desde donde estaba, logró reconocer a Suecia, ¿usando un delantal rosa?. Olvidando lo de "madurez y responsabilidad", se echó a reír, casi cayéndose al suelo y con lágrimas derramándose de sus ojos. Después de lograr respirar, empezó a correr en dirección a su causa de chiste y se le tiró encima, abrazándolo. Observó a Noruega y le grito:

-Hello! ¡Se ven tan graciosos desu yo~!

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OMG!! los nordicos en delantales!!
me muerooo!

Estaba de espaldas a la puerta recién abierta cuando comenzó a escuchar el inicio de una risa, luego una carcajada y fue entonces cuando reconoció esa voz.... Sealand.
Se dio la vuelta para ver al niño correr hacia él y abrazarlo, la sorpresa seguía invadiéndolo, pero le alegraba verlo, así que lo abrazó tambien.
"...un momento"
-¿Cómo v'niste aca? - preguntó sin ninguna sonrisa en su cara, ¿Acaso el niño se había venido solo? ¿Que no sabe que el mundo es un lugar demasiado grande para dejar a un niño viajar sin adultos? No observaba ningún adulto aparte de los 2 nórdicos y él en la casa de Noruega, ¿lo habían venido a dejar?...
Si el caso era otro que ese, le daría un buen sermón.
-V'niste solo, ¿ehhh Sea? - Preguntó en tono amenazante mientras le jalaba un cachete al menor en forma de castigo...
-¿No te d'je que te qu'daras en casa? - Siguió regañándolo con ese aura tan característico de Suecia que hace que todos le teman.
En cuanto le diera la respuesta, comenzaría a sermonearlo.
Se veía tan amenazante posible como su delantal rosa se lo permitía, pero él no reparaba en eso.

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Pobre Sealand!! Suecia es sobreprotector :3

"Uh oh" pensó el pequeño cuando hacía una expresión de preocupación, esa era exactamente la pregunta que Peter no quería que le hiciesen "Ahora sí estoy en problemas..."

Puesto que; para empezar Sealand había decidido el día anterior, quedarse con su "papá", entonces le pidió al vigilante que lo llevarán hasta su casa, sin avisar; entonces claro, eso no estaba en los planes de Suecia ya que él había decidido ir a esta reunión con sus colegas, pero aún así acogió al pequeño (como buen padre). La misma noche, Suecia le dijo a Sealand que saldría, pero el niño creía que iba a ir a una cena o algo sin mucha importancia, es por eso que cuando despertó ya no estaba y cuando se dió cuenta que era una reunión entre países, no dudó en ir. Como no había nadie en casa de Suecia, decidió tomar el tren. Pero como aún era "menor de edad" para los humanos, le pidió a el único vigilante del país de Sealand, a que fuera su cómplice en esto.

Y fué así como llegó a casa de Noruega

Sintió como las duras manos de Berwald halaban fuertemente sus mejías, pero cómo le dolía.

-¡Aaaau, aaaaaaau desu yoooooo~!- para pedir clemencia volteó a ver el rostro del más alto, abrió sus ojos lo más que estos le dejaban del asombro que tenía al ver la terrorífica expresión que hacía el otro país, se arrepintió de haberlo hecho; había escuchado que Suecia era intimidante pero no tenía idea de cuanto. De tanto miedo que tenía, no pudo ver a otro lado, sentía que estaba petrificado, como si su alma había dejado su cuerpo para lograr huir de la temible situación; hasta que lanzó un enorme grito, cerró los ojos y esperó, rogando a que alguien hablara o que cambiaran el tema para no tener que confesarse.

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ese fué un desu yo de dolor XDDD
<------- eso te pasa por desobedecer a tu padre, sea-kun!!

Hasta que Berwald habló no había pensado en como el más pequeño había llegado hasta allí.

-E-Espera Su-san, y-ya no lo jales –trato de intervenir, aunque estaba algo asustado por la mirada y el tono de voz del sueco.

-N-No tienes que lastimarlo, moi moi- le dijo con una sonrisa nerviosa, intimidado, mientras se acercaba al mayor y tomaba sus manos para que soltara a Sealand.

Entonces se volteó para mirar de frente a Peter.

-Si querías venir pudiste habernos llamado antes... –le dijo soltando un suspiro, aunque en su voz se notaba cierto tono de seriedad. Al fin y al cabo era su hijo también, y le preocupaba.

Alzó una ceja observando la imagen que daba Suecia, en su vida hubiera imaginado vestido así a alguien tan serio como él. Suspiró pesadamente pensando que no había más que hacer por ello, no iría a comprar delantales solo porque no les gustasen, cumplían su función y punto, independientemente del color o la forma (aunque consideraba que “esos” eran un caso especial que después incineraría… ejemm.. digo guardaría por ahí). Se levantó para terminar de sacar los ingredientes y colocarlos con cuidado en la mesa cuando Sealand llegó, pudo reconocerlo por su inconfundible voz.

-hei* Sealand

Saludo a su sobrino (porque de cierta manera lo era) sin prestar mucha atención en el por qué había ido. Al principio se había preguntado sobre el pequeño pero supuso que sus “padres” lo habían dejado con Inglaterra o algo así. Ambos padres se mostraban preocupados ya que prácticamente llegó solo. Los observo de lejos sintiendo que no debía inmiscuirse en los asuntos de la familia, en especial en la educación del pequeño casi país. Recordó la tarta de limón que había preparado por motivos desconocidos incluso para él y le pareció que sería un buen postre a modo de compensar a Peter por el regaño.

Comenzó a espolvorear los filetes con eneldo de manera cuidadosa, para no perder tiempo.

*hola ((que bueno que llego sea-kun >w<, haha y que bonitos padres owo aunque regañones XD))

Escuchó a Finlandia y soltó a Sealand. Ya lo había regañado lo suficiente.
Llegó el momento de los sermones, pláticas sobre lo que no estuvo bien que hiciera, que les pasa a los niños cuando desobedecen a sus padres, que no es seguro para niños salir solos, que debía decirle a cualquiera de los 2 (Tino o Berwald) donde estaba, que le pudieron haber llamado, que un país no se comporta así... En fín todo los temas de los que podía haberle hablado los cubrió en lo que debió ser una eternidad con el menor.
Cuando hubo terminado dijo lo último que cerraría la charla.
-Pr'mete portarte b'en... ¿sí? - Terminó
Cuando el niño le hubo respondido, se acercó a él, lo abrazó y le dio un beso en la cabeza.

-L'mento eso, N'ruega - Dijo cuando se hubo acercado al nórdico que se mantuvo al margen de lo que era "una cosa de familia". No le correspondía haber observado eso, y no sabía si todo este asunto lo había incomodado, pero igual, lo pasado pasado es, y no tenía porque haberse arruinado la visita, es más, un miembro nuevo se había sumado a la reunión. Así que las cosas solo podían mejorar.

Agradeció a Finlandia y al cielo cuando este intervino, por fin las manos de Suecia le soltaron, pero sus mejillas quedaron siempre dolidas. Con una aburrida y triste expresión en su cara, escuchó el largo sermón del más alto, asintiendo la cabeza de rato en rato; cuando por fin terminó le prometió que no lo volvería a hacer y aceptó con una sonrisa, el beso en la frente, se alejó de él y fué a enterrar su cara contra el pecho de su "tío", apretando con sus brazos la espalda del noruego. Cuando estaba en eso; sintió un olor muy característico en la cocina nórdica, ¿pescado, quizá?

-Hueles a pescado- dijo aún en el regazo del nórdico.

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feliiiiiiz cumpleaños, Su-saaaaaaaaaaaan!! :D

Abrazo a su sobrino que ya había entendido su lección del día. Se le había olvidado que ya estaba haciendo los preparativos hasta que escucho el comentario del pequeño.

-ha es verdad- comentó sin demostrar mucho- es que estaba cocinando- tocó la cabeza del menor despeinándole un poco- y habrá postre…

Más compañía no le hacía daño a nadie así que estaba contento (por decirlo de alguna manera) que la familia estuviese ahí. Se apresuró a encender el horno y mientras este se calentaba continuó sazonando. Aprovecharía que ya estaba el marinado y le costaría menos tiempo del habitual.

-¿qué les gustaría tomar?


((feliz cumpleañossss >w< noru: felicidades....))

Sobó ligeramente las mejillas de Sealand para que dejaran de dolerle y fue donde Noruega.

-¿Necesitas que te ayude en algo? Moi moi - le pregúntó mientras tomaba el delantal sobrante y se lo ponía... y Berwald aún seguía sermoneando al rubio más pequeño.

-Para mí cualquier cosa está bien -dijo sonriendo - aunque no sé que quieran ellos - se volteó a mirar a Su-san (que ya había dejado de darle el sermón a Sea-kun) y a Peter.

-Lo que t'men todos esta bien - De todas formas comerían el arenque, y al estar en una casa diferente a la suya, le gustaba probar cosas diferentes, o si solo fuera café, siempre que haya sido cultivado en Noruega, sería perfecto.

Se acercó a Finlandia para acariciarle en la mejilla ligeramente por haberse mantenido serio y apoyarlo, aunque su afecto por el niño tambien lo demostró cuando le dio cariño una vez hubiera terminado todo el asunto del regaño.
-Te ves l'ndo - Le dijo refiriéndose al delantal que se había puesto, le quedaba exactamente como se lo había imaginado. Entonces cayó en cuenta del traje que tenía, se vio a sí mismo, riendo un poco.

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Su-san quisiera agradecerles por todos su buenos deseos de cumpleaños!!!! ^^
Suecia: Tack :/ <--- intento de sonrisa

Se sonrojó ante el comentario y la caricia de Suecia. Miró hacia otro lado.

-N-No digas eso Su-san -dijo aún sonrojado, mientras caminaba hacia el horno para revisar si ya estaba listo para cocinar.

-El horno está listo moi moi-le dijo a Noruega una vez que lo hubo revisado.

No podía aguantar para comer, se le hacía agua la boca de tan sólo pensarlo, y su estómago ya llevaba un tiempo que le exigía alimento.

Agradeció a Tino por avisarle y se dispuso a colocar los ingredientes listos, tenía pensado que mientras esperaban podría poner la mesa.

-Peter… me ayudas a acomodar las cosas?- preguntó a la futura nación mientras habría una estantería mostrando los platos y vasos que podían ser usados. Eran cuatro en total así que dispuso de cuatro platos y cuatro vasos pero no podía cargarlos todos- estará listo en unos diez minutos, tino… podría servir por favor?

((no andaba muerta andaba de parranda muajajajaja :claaro: nah no es cierto XD perdón por el retrazo, tuve algunas vueltas inutiles que dar a la escuela :/ :mirar: ))

Perdoooon por el grandisimo retraso.... pero esque las tareas y examenes bleh!! odio mi vida!! D:
jeje de nada susan! (da un grito de fangirl por la casi-sonrisa)

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Con una alegre sonrisa le agradeció al finlandés por la caricia a su mejía, olvidando el dolor que Suecia le había ocasionado, miró emocionadamente a Noruega, estaba tan feliz que habría postre, comenzó a imaginar como sabría, ¿sería de chocolate?, ¿talvez un cheesecake? hasta que recordó que Tino siempre le decía que nunca iba a haber postre sin antes terminar la comida principal, eso acabó un poco con el entusiasmo de Sealand, pero, era pescado, le gustaba mucho; especialmente acompañado de papas fritas (fish and chips XD) las cuales deseaba que cocinaran para él, pero se lo diría luego a alguno de los países mayores.

Respondió al mandato de Noruega con un radiante: -¡Claro, desu yo~!- y se dirigió a donde los platos se encontraban, tomó cuidadosamente cuatro y los colocó en la mesa.

Las cosas estaban mejorando y todo el asunto del regaño había quedado atrás. Peter parecía llevarse muy bien con Noruega, así que talvez el niño sí tenía un talento innato para tener buenas relaciones con los demás países, por lo menos ya se había ganado el cariño de la mayoría de los nórdicos.

-Si esta l'sto el postre ant's de la c'mida, sup'ngo que podremos pr'bar un poco antes de t'empo - Dijo en forma amable, se sentía en ánimos de mimar a su hijo ya que el problema estaba resuelto, y que no había nada que le impidiera tener un día agradable.

Eso sin mencionar que el hambre y la expectación que el nuevo platillo que aún no probaba le provocaban, así que esperar a que todo el set estuviera listo sería innecesariamente tentador.

-¡¡Si, si siiii, desu yoooo~!!- "¿postre antes del almuerzo?" si, esa era la idea que tenía a Peter tan feliz, sin mencionar que todo el camino desde la casa de Suecia hasta la de Noruega y el hecho que no había desayunado, le habían acumulado muchísima hambre y el olor de lo que estaban cocinando, no ayudaba.

De tan solo imaginar el sabor dulce que pronto estaría en su boca, se emocionó mucho, dió un pequeño saltito, que, sin querer hizo que el plato de la hermosa vajilla de Noruega, se le soltara de las manos; cayó y se quebró. Sealand quedó con una expresión de sorpresa y susto, estuvo viendo a los pedazos del plato que se encontraban en el suelo como si estuviera en shock; con la misma expresión en su rostro subió la mirada a donde se encontraba el noruego, esperando un regaño de este.

-Claro Noru-kun, moi moi- le respondió.

Vio a su "hijo" tomando la vajilla y emocionado por poder ayudar y no pudo evitar sonreír ante esta escena, Sealand era un niño muy obediente y cariñoso, pero antes de que otra cosa sucediera el pequeño rubio tiró un plato que se rompió al chocar contra el suelo, haciendo un ruido muy fuerte.

Se acercó a donde la micronación y observó los pedazos del plato roto.

-Yo barro -suspiró - Peter, no toques nada, te puedes cortar... -dijo mientras iba por una escoba. (Tino es toda una madre (?))