De Visita [Privado]

Kadri lo escuchó, frunciendo el ceño y dejando ver una sonrisa triste al ver la expresión del otro.
Volteó a ver su postre, comiendolo calladamente a como no podía encontrar las palabras correctas para animar a su huesped.
Se preguntaba si talvez habría arruinado el delicioso almuerzo con sus preguntas, hasta que el joven volvió en si, preguntandole sobre el pastel.

-Ah! Si! De verdad estaba bueno!- Le dijo sonriendo y llevandose a la boca el ultimo pedazo en su plato. Se sentia mal por haber indagado en algo que claramente no le hacia feliz al peruano, asi que pensó en no volver a preguntarle y cambiar de tema.
-Dejame ayudarte jaja.- Rapidamente recogio los platos y los llevo a la cocina, para que el chico no tuviera el tiempo de decir lo contrario, y comenzo a lavarlos.
-Dime, me gustaría hacer algo por la tarde...que me recomiendas?...Si quieres podemos ir juntos?- Le preguntó, no queria incomodar al joven. -Jaja, pero si tienes algo que hacer no importa.- Le dijo, secando todo y ordenandolo en los gabinetes. Volteó a ver al chico y le acarició afectuosamente la cabeza, desordenandole un poco el cabello.
-Gracias por la deliciosa comida, por cierto. Eres muy bueno.-

(me habrá salido muy cortado? XDU)

(Para nada, y perdona la terrible demora! Esque no pagamos la internet xD)
-No, yo, eh...... gracias......- Miguel le sonrió, nervioso pero agradecido. De alguna manera ese gesto había aliviado la fuerza de sus recuerdos y mientras ayudaba a Kadri a lavar y secar puso todo su empeño en pensar a dónde podía llevarlo..... un buen sitio, un clásico....... con mar! un sitio con mar!!
-Vamos a Barranco!!!- Exclamó de pronto, con un entusiasmo feliz, pues Barranco es el distrito más hermoso y famoso de toda la ciudad de Lima. -Te va a encantar porque hay de todo y es bellísimo!!-

(XDDD eso pasa a veces)

El cuarto quedó un momento en silencio, mientras Kadri terminaba hasta con la ultima cuchara y dejaba al chico que claramente se habia perdido en sus pensamientos de nuevo.

Iba a decir algo para romper el hielo pero de repente el chico habló, sobresaltandolo un poco con su entusiasmo.
-Barranco! Debe ser precioso! Vamos!- Su rostro se ilumunió con la anticipación de conocer el lugar del que hablaba.

-Dejame cambiarme a algo más lijero y nos vamos!- Dijo con emocion, sin saber que tipo de lugar era aquel y que ropa podia usar, dirigiendose rápidamente a la habitacion que habia elegido y buscando entre sus maletas algo apropiado. Sin más demora se quitó la pesada ropa y joyas que traia puesto y se puso un pantalón lijero negro con un camisa beige de manta, junto con algunas pulseras y aretes como siempre acostumbraba.
Bajó las escaleras para confirmar si su atuendo le iria bien. Parecia un niño pequeño.
-Listo!!- Dijo emocionado.

(sexy *u*)
Miguel lo miró por un momento como examinando la transformación y sonrió, porque esa era justo la ropa que uno debe llevar a Barranco. Caminó junto con Kadri hacia la salida, cuando ya empezaba a calentar más el sol y se veía el precioso cielo azul que Lima a veces tiene el bien de regalarle a los peruanos.
-Qué bueno, se abrió el cielo!!- exclamó Miguel asombrado, pues era algo que pasaba poquísimas veces y menos en esa época del año. Luego de sentir el agradable calor en su piel, Miguel se volvió a Kadri y preguntó -Quieres ir en auto o mejor en bicicleta? Esque el malecón de Barranco es tan rico recorrerlo en bici.....!-
(eso del malecón es verdad <3 el malecón de Barranco es es sitio más genial de Lima porque está ahicito nomás el mar y tiene unas tiendas de ropa preciosas.)

(me encanta como hablas *0* con todo el sabor)

Salió de la casa con el chico, viendo como la lluvia habia parado y ahora se asomaba un sol amigable y un cielo azul sin una sola nube, perfecto para pasear.
Oyó la pregunta del otro, y sin pensarlo dos veces le dijo: -En bicicleta! Que divertido!- Le sonrió riendo un poco. Hacia un dia precioso y no se podia desperdiciarlo llendo en auto.
-Acaso tienes dos bicicletas?- Le preguntó.

(*o* ay kiero ir a peru!!)

(Te encantaría <3 yo recontra-adoro mi país!)
-Cuarenta bicicletas- le confesó Miguel riendo, mientras se dirigía a su cochera y sacaba dos bicicletas de las cuarenta que habían.
-Esque aquí a mucha gente le gusta andar en bicicleta!- dijo, como excusándose, mientras le pasaba la suya. En su mente trazaba la ruta: irían por Miraflores, pasando por Larcomar que también era muy lindo, y luego llegarían a Barranco y se pasearían por el malecón hasta que abriese la galería de arte.......
-Te voy a llevar a ver pinturas virreinales, te parece?-, le propuso animado Miguel. -Tenemos miles acá. Hay en todas las embajadas de Perú, claro, pero no es lo mismo que verlas en la misma Lima!-

(Fijo! Se oye preeeecioso)

Kadri lo miró divertido al ver su coleccion de bicicletas, agradeciendolo cuando le dio la suya. Quien iba a pensar que las bicicletas serian tan populares?

-Si! Llevame! Me encantaria verlas.- Dijo con una gran sonrisa, volteando a ver su bici. -Eh...ok! Ehh..Vamos!- Dijo nervioso.
La montó, dio un profundo respiro y pedaleó...callendo de una al suelo como lo temía.
-C-como era...?- Dijo mirando al chico y riendo nervioso. -Estoy bien jeje. Vamos de nuevo!- La montó otra vez y se pudo estabilisar.
-B-bien!! Te sigo!- Le dijo decidido al muchacho, frunciendo el ceño con concentración.

(lol perdon por la hablada sin sentido XDU)

(estuvo bueno <3 yo estaba cantando en ruso ._. siento que me va a crecer barba de macho)
Miguel no se contuvo y rió con ganas mientras montaba su bicicleta con maestría bajando la calle. Reía porque el incidente le había hecho gracia, pero también porque el sol brillaba y la calle estaba limpia y despejada, y porque el viento le peinaba el cabello mientras bajaba a velocidad por la calzada. Siguió de frente y dió un giro a la derecha, saludando con su sonrisa a la gente que lo veía sorprendida. Sucedía que, como no le gustaba nada ir en auto, iba en bicicleta a todas partes. Eso y..... que en realidad no había salido muy bien en el exámen para el brevete de conducir......

(XDDDDDDDDDDDDDDD ruso! *0*!!)

Kadri trataba de seguirle el paso al chico, lograndolo despues de unos minutos.
Contento con su logro decidió ponerle más atencion al paisaje y las personas, tambien le puso bastante atención al chico deltante suyo, que al parecer iba sonriente en su bicicleta, con su cabello alborotado por el viento y una felicidad tangible en el aire. Kadri no pudo evitar reir en un tono alto, ya que la felicidad del chico se le habia contagiado.

Siguieron un rato en bicicleta, dando vueltas y girando esquinas, Kadri teniendo cuidado de no chocar contra un arbol o un pobre peatón y al mismo tiempo tratando de seguirle el paso al chico. Luego de un tiempo (no se que tan lejos estaria XDU fail) Kadri paró su bici cuando vio que el otro lo hacia, dando gracias por un respiro, ya que no montaba bicicleta desde que era niño.

(jajaja XD q lindo XD esos examenes son dificiles D<)

(seee deben ser O3O yo no sé si voy a pasar......)
Miguel paró justo delante de un lindo parque en Miraflores y se sentó en una banca, invitando con una sonrisa a Kadri a sentarse. La verdad, montar en bicicleta le quitaba la timidez y las inhibiciones, cuando lo hacía sentía de nuevo el viejo orgullo de su pueblo, los hijos del sol. Pasó la mano algo distraído por un arbusto cercano, sintiendo las hojas frías.
-Disculpa si fui muy rápido, la verdad me entusiasmé un poquito-, se disculpó sonriente. -Pero Barranco ya no queda muy lejos de aquí..... es el distrito más romántico de Lima, dicen, por eso es popular.- Y era verdad, con sus casas y sus calles de piedra Barranco era perfecto para escribir un romance.

(yo los tengo que hacer XDDDDUU)

Estacionó su bici y se sentó en la banca en que el otro se habia sentado, respirando el aire fresco y cerrando los ojos para sentir los calidos rayos de sol en su rostro.

-No importa, al final te pude seguir jajaja.- Luego oyó lo que le dijo, emocionandose cada vez más con conocer aquel lugar. Sabía que quedaría encantado.

-Romantico?- Sonrió, a Kadri le parecia que hasta ahora todo ese lugar era bastante magico y romantico, ya queria llegar a Barranco. -Te has enamorado alla?- Se preguntaba si el chico tenia alguna historia especial, ya que se veia que le gustaba aquel lugar.

(horror de horrores D: )
-..... Sí..... la verdad, sí......- Pero de quién? Miguel no recordaba. Sólo sabía que Barranco era especial, era un lugar al que iba siempre, porque amaba ese lugar, porque amaba...... no recordaba. Decidió rendirse en el tema, ya que veía que no llevaba a nada. Quedó mirando hacia el cielo, sonriendo pero algo distante sin querer.
-La verdad..... no me acuerdo.......-
(sorry que sea un post corto ._. chau, buenas noches!!!! <3)

Kadri lo miró con una pequeña sonrisa, expectante de la historia que podria haber tras el amor del joven por aquel lugar, pero se vio algo sorprendido por su respuesta.

-No te acuerdas?- Le dijo levantando las cejas, para luego cerrar sus ojos pensativo. -Supongo que cosas como esas pasan.- Dijo, no realmente en respuesta a esto, sino talves respondiendose a si mismo.
-Pero supongo,- Dijo, esta vez mirando al muchacho con una sonrisa dulce.- Que si tienes buenos recuerdos y sentimientos hacia ese lugar, entonces no importa. Sabes, me agrada mucho que te guste el lugar donde vives.- Le terminó comentando.
(para nada XD)

(okay éste post y a dormir ._.)
-De veras?- Miguel salió de su ensueño y lo miró con una sonrisa. -Algún día cuando pueda quisiera ir a donde vives tú. Me pregunto cómo será..... o si hace calor......!- Ya que ya habían pasado unos minutos, Miguel se levantó y subió a su bicicleta de nuevo.
-Vamos!-, le dijo a Kadri mientras arrancaba. -Hay que llegar antes de la ola de turistas o no vamos a poder ver bien el mar..... en el camino te cuento algunas cosas del malecón, tiene muchísima historia.-

(ahora sí buenas noches <3 mañana me compro mi laptop OWÓ chau!!)

-Jaja, pues si, hace bastante calor. Es que allá el sol es mucho más agresivo que el de aqui.- Le respondió, sonriendole. Kadri también amaba su pais , pero tambien le encantaba conocer sobre otras culturas.

-Bien! Vamos!- Dijo, levantandose y estirandose un poco para comenzar la segunda parte del viaje en bicicleta.
Tomó su bici y la montó, ésta vez conduciendo al lado del chico.
"Ya le agarré la practica!" Pensó entusiasmado. "O será que él va más lento a propósito?"

-Bien! Cuentame! Que mejor forma de conocer un pais sino con su gente?- Kadri estaba feliz. Su estadía no podia ponerse mejor.

(buenas nocheeees <3! cuidate!)

Miguel -que sí, en realidad iba más lento a propósito- le contó a Kadri todo lo que se le venía a la mente sobre el malecón y sobre Miraflores. Historias de amor, dramas sangrientos, anécdotas cómicas, algunas incluso de la lejana época del virrey Amat, cuando España aún se paseaba por las calles de Lima- antaño Ciudad de Reyes. Le contó también sobre los edificios que iban pasando, no sólo sobre los que estaban sino sobre los que habían estado. Y al parar en un semáforo le contó la historia de la casa maldita de Matusita.
-La gente no se la toma mucho en serio por el nombre, es gracioso- le dijo Miguel mientras miraba vigilante la luz roja del semáforo. -Pero han pasado ya tantas cosas en ese lugar..... ha muerto y enloquecido tanta gente que ahora tienen la puerta cerrada y sellada, porque la casa simplemente no se deja demoler......-
(eso es verdad ._. cada vez que alguien intenta demoler la casa, pasan cosas feas.... la última vez fue cuando un productor de televisión decidió tratar de pasar una noche ahí y a la mañana siguiente lo encontraron en la calle, que se había vuelto loco .___.)

(que mieeeedo XDDD! yo ni loca me acercaria a esta casa XD)

-M-muerto?- Le preguntó, sintiendo un escalofrio recorrer su espalda. -Pero! pero! Como no se deja demoler?!- Dijo mirandolo asustado. Kadri era un cobarde cuando se trataba de cosas que no podia explicar con teorias de Alláh o la ciencia.

-Como haces para hablar tan tranquilo de esa casa?!- Miró al frente cuando la luz del semáforo cambió y comenzó a pedalear, suspirando ante su evidente cobardía.
-Nunca has visto un fantasma?- Le prguntó, queriendo saber si habia fantasmas en la casa donde se estaba hospedando.

(nadie lo hace pero mi papá una vez entró OWÓ pero no más de 5 centímetros xD)
Miguel frunció el ceño, pensativo. -Aquí no se llaman fantasmas, aquí son condenados..... y sí, sí he visto, y muchos.- No le dijo que en el jardín de su casa, para no asustarlo, y dobló una esquina elegantemente en la bicicleta.
-Sólo para que sepas, cuando te encuentres con un condenado tienes que pelearte con él hasta que amanezca! Si le cae la luz del sol se salvará y subirá al cielo convertido en una paloma o cualquier otra ave blanca!-

(XDDDD!!! muy valiente!)

-Tengo q-que pelearme hasta la mañana?!!- Le dijo alarmado, no sabía donde sacaría la valentia, sin considerar que podria ser dificil que apareciera uno.

-Eres muy valiente!- Exclamó, tratando de poner más atencion al camino ya que casi se caia al oir lo que decia al muchacho. -Yo me escondería jajaja.-

Siguió pedaleando, imaginandose como sería y lo bien que se sentiria liberar a una de esas almas.

-Pero! sigueme contando sobre la historia!- Le dijo, tratando de cambiar de tema, porque sabia que no podria dormir si seguia indagando, aunque de verdad le sonaba muy interesante todo eso.

(o3o q mieeedo XDDD *la cobarde es ella*)

(lo de los condenados es todo folclore de acá <3 yo me sé muchas historias porque soy de la sierra, no de la costa donde JAMÁS pasa nada -3-)
Miguel le sonrió agradecido, en realidad no era tanto valentía como cariño por esos espíritus y mucha lástima. Pero obedeció y le siguió contando la interesante historia de la ciudad hasta que llegó hasta ellos la delicada brisa marina que hizo que Miguel se entusiasmase y acelerara hasta que llegaron a un acantilado, bordeado por una cerca de cadenas que daba a mar abierto. El lugar estaba tranquilo y algo vacío, a no ser por algunos transeuntes y ciclistas que pasaban, y el susurro agradable del mar les llegaba desde abajo. Miguel suspiró feliz, contemplando con cariño al mar de su país.

(jajaja XDDD auun asii XDD *miedo*)

Kadri oia entusiasmado las historias sobre el lugar, pudiendo olvidar el escalofrio que le habia causado aquella casa maldita.
Volvió a ver la frente cuando pudo oler el tipico aroma de la sal en el aire, y se soprendió un poco cuando Miguel aceleró de repente, tratando de seguirle el paso.
Aunque paró en seco al tener en frente aquella vista magnifica del mar, que brillaba como diamantes con los rayos de sol. Respiró profundo, la vista y el ambiente solitario eran realmente relajantes, no como las playas de su pais, que siempre estaban cargados de oleadas de gente y con un sol ardiente y atmosfera pesada.

-Precioso.- Dijo despues de unos minutos de contemplarlo.-Tan limpio y tranquilo.- Volteó a ver al menor con una gran sonrisa. -Gracias por traerme aqui, tu país es hermoso.-

-Gracias por venir....- le replicó Miguel con una sonrisa. La verdad es que últimamente se había estado sintiendo algo solo..... Adoraba y agradecía la compañía de sus hermanos de Latinoamérica, pero no era lo mismo que...... no recordaba qué. Pero no era lo mismo. Miguel miró hacia el cielo limpio y claro, decidido a no pensar mucho en esas cuestiones.
Miguel pasó la cerca de cadenas con libertad y bajó por las escaleras hacia la playa, haciéndole una señal a su invitado para que lo siguiese. Antes de llegar a la arena por pura costumbre se quitó los zapatos y caminó tranquilo para al fin poder bordear la arena húmeda de agua salada. El mar peruano no es caliente, es frío, pero es un frío agradable al que uno llega a querer con el tiempo.

-Al contrario...gracias por ser tan buen anfitrion.- Le dijo, volteando a mirar al inmenso mar que se abria ante ellos.
Volvió en si cuando vio que el muchacho habia traspasado las cadenas y le hacia señas para seguirlo, asi que caminó hacia él y luego hacia la playa, donde se quitó los zapatos y se arroyó los pantalones, para luego caminar al borde del mar, el agua mojando levemente sus pies a como venian e iban las olas.

-Fria...- Dijo para si mismo cuando el agua tocó su piel. Aunque no estaba helada pero era una temperatura amable para el clima soleado de la region.
Se acercó un poco más al chico y le tomó de la mano, sonriendole dulcemente, mientras caminaba a su lado. Sin querer, miró a los ojos de su acompañante, perdiendose en ellos y en su brillante felicidad. Sin darse cuenta se fue acercando a él, buscando sus labios...pero cayó en cuenta de lo que iba a hacer así que se retractó y volteó a ver a otra parte.
-A-ah! Me pregunto porque no hay tanta gente!- Dijo, tratando de cambiar el tema y deseando que el chico n se hubiera dado cuenta de su intento. -Es una hermosa playa! Es muy raro que esté tan sola.-

(XD en marruecos es aceptable que 2 amigos del mismo sexo anden de la mano)

Miguel no se dió cuenta de nada, y tomó la mano de su compañero de lo más tranquilo, tal era la felicidad que sentía en ese momento. -Ha de ser porque la gente aquí cree que ya conoce la playa....... pero eso es imposible!-, dijo riendo mientras se inclinaba para recoger una concha de la arena lavada por el mar. -La playa cambia todos los días con el mar y el cielo, nunca la conocemos del todo y al día siguiente ya cambió......- siguió diciendo mientras le ofrecía la conchita a Kadri. Era de las normales pequeñas que se encuentran por ahí, pero era blanca y muy bonita incluso para esa playa.
(sorry la cortedad pero el romance me deja toda feliz *u*)

El moreno suspiró con alivio al ver que el otro actuaba con naturalidad, y pensó que deberia comenzar a actuar asi tambien antes de levantar ninguna sospecha.
"Quiero hacerlo." Pensó, mirando ido al horizonte. "Pero no quiero incomodarlo."
Fue entonces cuando el otro llamó su atención y le regaló una linda conchita, blanca como una nube. Kadri entonces sonrió, aprentando un poco más fuerte la mano del otro y parando de caminar. En un movimiento suave, lo tomó del hombro con la mano que aun tenia la conchita y se acercó sin titubear, dandole un ligero pero tierno beso en los labios.
Se separó del chico unos momentos despues, cayendo de nuevo en si mismo.
-Ah...Lo siento...Emm...Esta es, emm.. una costumbre de mi país al dar las gracias.- Mintió.
(romanceee~)