Misión Suplantar

Había momentos en su vida en que se preguntaba si algunas de sus acciones eran las mas correctas, pero eran escasas las situaciones que lo hacían dudar del buen juicio de sus superiores… -“Pero que es esta tontería?” Pensó mientras extendía una blusa marinera y unas bermudas azules. Para esta misión en particular se le había dado la tarea de infiltrarse y suplantar al “hermano” menor de Inglaterra. Realmente ahora les veía el parecido, con su pésimo gusto para vestir…

Frunció el ceño cuando comenzaron a caracterizarlo, maquillando en su rostro las exageradas y enormes cejas de la auto proclamada nación. Antes que se diera cuenta ya le habían colocado las extrañas prendas encima con todo y un ridículo sombrerito, su parche negro, lo habían remplazado por uno diferente; en un color mas claro y en un material mas fresco, con el que podía pretender que había sufrido una insignificante herida reciente.

Llego a una de las bases de la nación británica, le habían hecho pasar sin notar nadie que algo andaba mal, caminaba con pasitos cortos y muy curioso mirando todo a su alrededor, inspeccionándolo y preguntándose como era que el ingles tenia tan mal gusto. Encontró un espejo en el cual por fin pudo mirarse, sorprendido por el parecido que habían logrado los del espionaje. En su rostro se dibujaba un asombro con tintes infantiles que pocas veces dejaba ver, dejo escapar una suave risita al pensar en lo gracioso que sería engañar al enemigo.

(lo prometido es deuda XD ahi esta iggy~)

Sus pasos eran largos y algo apresurados. Desde el momento en que escuchó salir de los labios de una de sus hadas las palabras "Sealand", "parche en un ojo" y "en una de las bases" dejó todo lo que hacía para dirigirse de inmediato al lugar donde se encontraba el pequeño niño de cejas igual de grandes que las de él.

- "¡¿En qué te has metido ahora estúpido enano?!" - no paraba de torturarse con esa pregunta a cada paso furioso que daba mientras se lastimaba el labio inferior mordiéndolo.

¿Preocupado? Sí y su semblante lo justificaba ¡¿Cómo no estarlo?! Ni siquiera Suecia o Finlandia se habían molestado en avisarle que el niño se había lastimado de tal manera. Espero que sea error de mis hadas...

- ¡Sealand! - expresó entre alegría y desesperación al ver esa melena rubia y el traje azul de marinerito que solía llevar distraído al frente de un espejo... un nudo en la garganta se le hizo al comprobar que lo que aquella hada le había dicho fue cierto. - What the bloody hell...?! - parpadeó varias veces esperando a que se tratase de un espejismo - ¡¿Qué te hiciste?! ¿Estás bien? - se acercó más a él.

Salto un poco al escuchar la voz del británico, sus instintos le gritaban que se lanzara sobre el para atacarlo e intentar aplastarlo, sin embargo solo ladeo el rostro con una sonrisa tierna para recibirlo, esforzándose mucho por pretender que se trataba de uno de sus hermanos. -Good day to you.~ -Logró decir suprimiendo su acento alemán y su repulsión mientras que internamente sonrió al sentir que había conseguido al menos de primera impresión engañar a su enemigo. No había estudiado mucho a la nación que suplantaba, pero esperaba poder improvisar adecuadamente. -No ha sido nada…- Le aseguró forzándose a lagrimear un poco, se llevo las manos al rostro fingiendo que intentaba cubrirse. Se había preparado con un ojo de vidrio y hasta lente de contacto de color, más esperaba no fuera necesario quitarse el parche, traerlo le recordaba muchas cosas, se sentía incompleto sin el. -Sabes bien que mi estructura improvisada y temporal siempre tiene que estar en reparaciones. Pero en cuanto restaure mis plataformas estaré bien de nuevo… desu yo~ x___^U- Eso ultimo le había costado algo de trabajo pero se había esmerado en dar una de sus mejores sonrisas, aunque seguramente no lograría igualar la de la auto proclamada nación.

Por un momento estaba a punto de sentir su ser derrumbarse cuando lo vio... ¿lagrimeando? ¿e incluso estaba malherido? Nunca lo había visto antes así a menos que sea para hacerse pasar la víctima al autoproclamarse una nación cosa que no lo es, sin embargo todo esa sensación de rabia y odio la cual pronto se descargaría sobre la nación que se había atrevido a lastimarlo se vio apaciguada a su inusual forma de... ¿expresarse? ¿Desde cuando Sealand usa tanta formalidad al hablarme?

¿Acaso el niño que tenía al frente no...?

- "Imposible. No conosco a otro niño tan enano que repita como idiota "desu yo" al final de cada oración como si sufriera un transtorno de lengua o..." -

Fue inevitable que sus mejillas tomaran un color rosa suave al verle sonreír de manera tan infantil. Sentía un aura diferente en el niño... una ternura diferente. Había visto sonreír varias veces a Sealand, pero nunca de esa manera.

- ¿Estás seguro? Puedo llevarte a un hospital para que puedan revisarte, si quieres - sujetó su mano en señal que él lo escoltaría al lugar que el otro dijese.

Cuando el ingles le tomo de la mano, no pudo evitar palidecer un poco, sentía una horrible y extraña sensación en su estomago, ganas de hacerle una llave para someterlo y estrellarle la cara contra el suelo… se contuvo, se había contenido de llorar al momento en que había perdido su ojo, esto sería solo pasajero y era su misión, se repetía internamente una y otra vez obligándose a sonreírle al enemigo. -No es necesario, estoy bien así que no te preocupes mas por mí, desu yo!~- Aseguró con energía mientras asentía con lo que el consideraba un exceso de energía. Ir a un hospital era arriesgado, terminarían descubriéndolo, tenía que distraer al británico de otro modo.
-Mejor… hazme algo de cenar!! Tengo mucha hambre, desu yo!!~- Dijo mientras le apretaba un poco la mano abrazándose a esta, intentando hacer que de momento se olvidase del hospital. Decidió presionar al ingles un poco mas arriesgando su suerte, mirándole casi como suplicando y con la vocecita mas tierna que pudo. -Please!~- Frotaba su estomago con su mano como si tuviese algo de hambre.

Sentía la pequeña mano de su hermano menor apretando la suya con insistencia mientras le veía rogar por comida. Sabía exactamente lo que tenía que hacer. Ese parche en su ojo... su repentina visita... su extraño comportamiento... algo andaba mal.

- Sealand... - iba a negarle la suplica, pero... ¿desde cuando él era tan débil a una petición de Peter? Ese inocente rostro, su fina vocesita, sus tiernas acciones... ¿qué me pasa? Suspiró profundo como si no hubiera otro remedio - ...ok, but! - puntualizó - tomorrow I will take you there, right? - sonrió y le acarició la cabeza con sutileza.

Alzó la mirada y vio que el clima otra vez había cambiado drásticamente ¿otra vez lloverá? El cielo infestado de nubes y el viento golpeando con fuerza solo prognosticaba tormenta. Decidió llevar cuanto antes a su hermano a una de sus casas cerca de ahí para poder alimentarse y pasar la noche. Si se quedaban un rato más podrían ser atrapados por aquella tormenta, y en el peor de los casos, coger un resfriado.

Se preocupo al ver titubear al británico, sería que ya lo había descubierto o que comenzaba a sospechar. Igual por ahora todo estaba saliendo bien y aliviado le siguió cuando acepto su petición, se obligo a responder a la caricia con una sonrisa más, esforzándose mucho por imaginar que en lugar de ese sujeto se trataba de uno de sus hermanos y logrando un poco de mayor calidez. -Right, desu-yo~ - Respondió siguiéndole muy obediente aún y cuando apresuraba el paso, la realidad es que le habría gustado soltarle a la brevedad posible pero como no tenía la menor idea de a donde le llevaba no le quedaba mas remedio que permanecer así.
Durante el camino se mantuvo pensativo, hasta el momento el británico había sido bastante considerado, incluso podía decir que amable, lo miraba de vez en cuando de reojo, recordando como había sido cada momento en que su hermano y el se enfrentaban y jamás hubiese imaginado que esa nación fuese capaz de proyectar algo mas que crueldad y prepotencia.
Empujo rápidamente todos esos pensamientos de su mente para concentrarse en el día de mañana, esperando que el inglés no lo hubiera notado. Debía concentrarse en como deshacerse del parche y mostrarse como un perfecto y normal niñito, odiaba usar el ojo de vidrio, pero no quedaba otra opción. Quizá con eso podría convencer al otro de lo innecesario que era la visita al hospital.
Termino con su secuencia de pensamientos y la solución justo a tiempo pues comenzaban a caer algunas gotas de lluvia, pronto las gotas eran mas abundantes y continuas, termino lanzándole una nueva mirada de preocupación al ingles y preguntándose cuanto más faltaba, lo menos que necesitaba era quedar empapado bajo la lluvia y completamente perdido con el enemigo.

Jalando al menor de la mano y caminando con rapidez, llegaron al primer alojo que encontraron la cual era una casa que parecía verse un tanto abandonada y lo justificaban la poca prescencia de la fachada y el polvo dentro de ella, se notaba deshabitada.

¿Casa embrujada? Al principio lo creyó, sin embargo, no había señal de espíritus y el Gran Piano ocupando casi toda la habitación principal le trajo recuerdos.... él ya había estado ahí hacía unos meses... es más, esa casa y el piano le pertenecían pero olvidó de su existencia. Típico en el inglés olvidar las cosas.

- Let's see.... - caminó hasta donde quedaba el cuarto de limpieza y sacó una escoba y un mandil - Si deseas comer rápido tendrás que ayudarme a desempolvar - dijo con un poco de autoridad en la voz mientras se anudaba por detrás el mandil para empezar a barrer.

Avanzaba detrás del inglés obedientemente suprimiendo las ganas de quejarse por el modo tan brusco en que prácticamente lo arrastraba, siguiéndole hasta el interior del desaliñado refugio, sentía un poco de escalofríos, mas que nada por que no sabía con que intenciones lo habían traído aquí. Miro en todas direcciones intentando ubicar algo con que poder moler a golpes al ingles, quizá una pata de silla o un tablón suelto… este le estaba dando la espalda y buscando algo. Así que era el momento perfecto para dejarlo inconsciente con un golpe, atarlo y llevarlo de regreso a la base apenas estaba localizando algo, cuando el otro súbitamente volteo.
-Right- Sintió alivió cuando vio al otro tomar un mandil y escoba, al menos en el lapso de la limpieza podría explorar un poco el lugar. -Tomó un plumero levantándolo con la puntita de sus dedos, pues estaba también cubierto de polvo, saco un pañuelito limpiando cuidadoso antes de tomarlo completamente con su mano. -Disgusting~- dijo en voz baja antes de darle una suave sacudida y estornudando por el polvo que salía y que parecía tener muchos años allí resguardado, doblo cuidadoso su pañuelito de nuevo guardándolo en su bolsillo, recordando tirarlo después y se inició en la tarea de sacudir comenzando por la mesa. -“Mein Gott!! Como fue que caí en este insalubre lugar??”- Estaba totalmente horrorizado con el lugar, gruesas capas de polvo que hablaban de que el lugar no había sido usado en años, sin olvidad el olor de humedad, le estaba llevando bastante tiempo pues, sacudía y sacudía minuciosamente milímetro a milímetro, incluso olvidándose del enemigo, solo se detuvo hasta pasar su dedo por la superficie y que este no conservara un solo espectro de polvo o suciedad. Tomó nota mental de revisar los platos donde el inglés pretendería servirle de comer, le causaba mas horror comer en un plato mal lavado que ser descubierto, al menos por el momento.

Alzó nuevamente su espesa ceja en señal de extrañarse por la excesiva "delicadez" de su hermano menor a su vez también de no haberle salido con una queja cómo "¡No quiero!" o "¡Hazlo tú Inglaterra idiota!".... ¿era eso lo que llamaban madurez? Internamente podía sentir esa pequeña y leve chispa de sentirse un hermano mayor orgulloso.

- Bless you - le sonrió con amabilidad al momento de escucharle estornudar y regresó a lo que iba a hacer.

¡Qué desastre! Tanto polvo... tan solo en la primera barrida ya había acumulado un gran puñado de tierra y no era ni tan siquiera la segunda pasada de una esquina. Recordó entonces a su hermano mientras barría, así solo levantaba más el polvo y lograría hacer estornudar más a Sealand... ¡N-no es que le importase del todo su bienestar! Claro que no, pero quería ahorrarse la molestia de escucharle quejar... si es que lo hacía.

- Voy a barrer primero el dormitorio - dijo como avisando al estar abandonando aquella habitación para irse a la otra. Tenían suerte que la casa no fuese tan grande, así no tendrían tanto que limpiar.

Salió del lugar para pasar por el pequeño pasillo y llegar al único dormitorio de esa casa de playa. El sonido chirriante de oxidado sonó principalmente al abrir la puerta y ver el cuarto como se esperaba verlo, intacto y con más polvo. Suspiró.

Entró dejando su escoba en un costado y se acercó a la enorme cama la cual tomaba por ambas esquinas de las sábanas; las sacudió levantando con fuerza, cerrando los ojos y aguantando la respiración por unos momentos. - Realmente... debería tener más en cuenta ciertas propiedades abandonadas y mandarlas a arreglar. - tosió un poco haciendo de las sábanas una pelota y dejándola sobre la cama.

Su mirada se perdió en la ventana. Aun la lluvia seguía cayendo con fuerza de tal manera que aun no podía escuchar el suave movimiento del mar. Como aborrecía la lluvia.

Tosió por segunda vez mientras se echaba sobre la cama aun un poco polvorienta ¿cansancio? Tal vez era alérgico al polvo, se sentía algo mareado. Unos segundos de descanso no le haría nada mal y Sealand no tenía el porqué enterarse.


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(Off: otoosan! x'D olvidé por completo este temaaaa *se auto-castiga* sorryyyyyyyyyyyy ;~~;)

No presto tanta atención como debería, continuaba limpiando minucioso, puesto que el horrendo inglés solo había hecho mas desorden con el espantoso despliegue de habilidades de limpieza doméstica. Era mejor que lo dejara limpiar este desorden por su cuenta, así que agradeció cuando se disculpo para ir a otra área. Ya había terminado con la mesa, la cual no había quedado impecable, meramente era higiénicamente aceptable. No conforme con pasarle el sacudidor encima cerca de 40 veces, le dio una ultima limpiada a la superficie, para dirigirse después a las empolvadas lámparas y sacudir también manteles y cortinas, limpiando efusivamente todo lo que encontraba a su paso. Esta misión se había prolongado innecesariamente, pero, ¿como dejar tal desorden así como así?. Pujo un poco molesto, inflando las mejillas, después se resignó y continuó hasta que considero que el lugar pasaba los mínimos requerimientos de salubridad e higiene. -“Ese bastard… donde habrá ido.”- Ya había pasado bastante tiempo, desde que termino de limpiar y el inglés no regresaba. Infló de nuevo las mejillas molesto y se cruzo de brazos, decidió ir a buscarlo y con tal excusa examinar cada rincón y ver que podía usar a su favor o tan solo encontrar alguna salida de emergencia en caso de tener que salir precipitadamente.
Se asomó cuidadosamente en varias habitaciones, caminando con movimientos suaves para no hacer rechinar el desgastado piso, empujando muy sutilmente las puertas con toquecitos y entrando con pequeños pasos, explorando aquí y allá. Se sorprendió un poco cuando llegó a una recamara y se asomó lo más sutilmente por la pequeña abertura de la puerta mal cerrada… -“Ese… ese.. Haragán!”- Se masajeo el rostro para que no le fuese a dar una especie de tic. Pero que clase de irresponsable dejaba a un niño haciendo el trabajo sucio, mientras se dedicaba a descansar a sus anchas….. Momento… esto podía ser ventajoso… con la cara de pereza que se cargaba el cejudo, segurito caía dormido en cualquier instante, así resultaría mucho más sencillo sorprenderlo y someterlo, sonrió complacido de imaginar todos los métodos para someter que podría intentar, casi podía sentir como su ojo destilaba un brillo un tanto demoniaco en aquel rincón oscuro detrás de la puerta.

(xDU..... yo también xDU)

No sabía porqué, pero una mirada asesina, como si esta lo atravesara cuan espada, sentía desde atrás. Tenía ganas de voltear, su razonamiento le decía que lo hiciera, pero su organismo cada vez se sumía más y más en el profundo mundo del sueño, junto a los brazos de morfeo ¿Por qué siempre uno lo último que escucha es a su consciencia?

- Sea..... land..... - susurra teniendo como último recuerdo, la imagen burlona de un rubio de ojos azules y predominantes cejas con traje de marinerito.

¿Tanto sueño le podía causar una alergia? Nunca se había dado cuenta que eso podía afectarle, pero el cansancio que sentía era tan profundo que la tentadora sensación de cerrar los ojos y dejarse llevar era exquisitamente provocadora que no pudo evitar entrar al paraíso/infierno de los sueños... aunque en su caso lastimosamente siempre tendían en terminar en infierno.

....Tal vez ese infierno irreal podía verse opacado por la realidad que estaba por ocurrir.

El nivel de su respiración bajó haciéndose pesado y largo, dejó sus músculos relajarse, sus labios se entreabrieron; estaba completamente indefenso a cualquier ataque a menos que la alergia también le produciese un retraso en sus buenos reflejos.

¿Ataque de quién por cierto? Estaba él y.... ¿quién más era? Oh sí... el odioso de su hermanito... no. El máximo daño que le pudiese causar sería una palomillada aprovechando su estado inconsciente.

-“Perfekt!”- Sonrió milimétricamente curveando sus labios, muy apenas perceptible mientras observaba al inglés sumergirse en su sueño. Dio el más sutil de los empujones a la puerta para que esta se abriera finalmente y entró a la habitación con el pasos que apenas y acariciaban el suelo, conteniendo hasta su respiración para no hacer ningún ruido. Esperando y observando a unos metros lejos de su rango de visión hasta que lo notaba tan cansado que sería imposible que reaccionara a tiempo. Su minúscula sonrisa se amplio un poco mas a la vez que sacaba de uno de sus bolsillos una delgada y delicada tira metálica, angosta como un hilo; un bello instrumento de ejecución. Se trataba de una cuerda de piano, en el instrumento musical producían armoniosas notas, mientras que atadas al cuello del enemigo, producían aun un coro mas interesante. Extendió el delgado pero resistente hilo metálico, tensándolo hasta que formara una línea perfecta, admirándolo como destellaba con reflejos fugaces aun en aquella oscuridad.
Dio unos pasos mas, rodeando a su presa, sigiloso como serpiente y con el mismo deseo predador, aproximándose lento a su víctima que reposaba lo mas tranquila e inadvertidamente. Con cada paso que se acercaba mas, se dibujaban en su mente las diversas muecas de horror que haría el ingles al sentir la cuerda de piano cortar el paso del oxigeno a su cuerpo. Saboreaba la dulce venganza, sintiéndola ya tan propia, tan a su alcance. Después se podría quitar ese absurdo disfraz y desmaquillarse las exageradas y horribles cejas, para regresar a la normalidad, así sus hermanos y su jefe estarían tan orgullosos. Miro la figura que permanecía aun inmóvil, conservándose estático como una estatua unos instantes, acercándose mas de modo experimental, tan cerca que sentía ya la calidez del otro cuerpo, se inclino milímetro a milímetro, aún sosteniendo el delgado hilo metálico frente así tensado completamente.
Se detuvo estando ya tan cerca, no por compasión, ni por precaución, solo quería recordar perfectamente el rostro del inglés, sintió su sonrisa tornarse macabra, pero había esperado mucho por una oportunidad así y no la desperdiciaría, así que se inclino más tan cerca que sentía el aliento del otro.