F.r.i.e.n.d. (Privado)

Era un estupendo día, el ingles estaba de muy buen humor tal vez por que había dormido lo suficiente o porque ya no tenia tantos deberes, pero sea la razón que sea, salio a tomar un pequeño paseo para después detenerse en uno de sus restaurantes favorito a tomar taza de te, al entrar se percato que no había nadie, pero no le dio mucha importancia así que dirigió una mesa al fondo que estaba junto a un gran ventanal que daba a la calle donde se podía a preciar un pequeño parque, se quedo apreciando el parque mientra el mesero llegaba para pedir su orden, no le extrañaba que se tardara tanto ya que ese restauran tenia la mala fama de lo tardado que eran sus meseros, pero para el pequeño eso era estupendo, ya que podía apreciar mas las cosas a su alrededor y pensar para salir de la monótona y aburrida que era su vida.

Como era su costumbre, de vez en cuando deseaba salir de la exentricidad y bullicio de su ciudad,y relajarse en otro tipo de actividades, o simplemente salir a comer o a tomar un café.
Conocía un buen restaurante al cual acudió ese día. Al llegar allí, se percató de que estaba totalmente vacío a excepción de un jovencito un tanto extraño *nada a lo que no estuviera acostumbrado ya* que esperaba a que tomaran su orden seguramente, sentado en una mesa cerca de la ventana.

El rubio decidió que se sentaría en la mesa siguiente, de ese modo podía también distraerse observando hacia afuera, por lo que se dirigió hacia la otra mesa y tomó asiento quedando justo frente a frente con el chico.

Continua mirando hacia el parque, cuando por una extraña razón decidió mirar hacia la mesa vecina donde en ella había un hombre rubio, de tez blanca, ojos azules y un rostro bastante hermoso y eso hizo pensar al ingles que tal vez el hombre extraño era un modelo profesional o algo peor un playboy, lo miro examinándolo determinadamente, ya que para Nate era muy extraño ver un joven como el rubio por esos lugares.
Lo siguió mirando hasta que fue interrumpido por un mesero que pidió muy amablemente la orden del ingles
-Un te negro, por favor- dijo simplemente ,volviendo a mirar hacia el parque ya que el ingles sabia que si continuaba viendo al extraño el se percataría y eso seria muy vergonzoso para el pequeño

El norteamericano observaba por la ventana pero de reojo también examinaba al chico que tenía al frente, tenía un parche en el ojo y un cabello de un extraño color, era realmente una persona interesante!Probablemente participaba de algún espectáculo u obra de teatro.

El mesero pidió la orden del chico y luego se dirigió a su mesa para tomar la de él. Pidió un café negro y un trozo de pastel de chocolate, tenía muchas ganas de algo dulce en ese momento. Continuó pensando en la rareza del chico que estaba frente a él una vez se hubo marchado el mesero, entonces una idea cruzó fugaz por su mente.

Se puso de pie y se dirigió a la mesa del jovencito, quedando de pie junto a él.

-Excuse me...- llamó su atención mientras le sonreía abiertamente, dejando ver su perfecta sonrisa, y hablandole con una voz suave y melodiosa.

Seguía mirando hacia fuera cuando escucho una voz extraña que no era la del mesero,y eso lo hizo miro hacia la mesa del enfrente y al ver que el lindo chico no estaba, dedujo que tenia que ser el estaba hablándole ya que no habia nadie mas en el restaurante,mas que ellos dos, eso lo hizo ponerse un poco nervioso ya que no sabia que decirle si le preguntaba por que lo estaba mirando tanto.
"Rayos, sabia que no debía de mirarlo tanto" pensó al mirar al rubio enfrente de el, lo miro por un momento, tratando de tranquilizar sus nervios y con una expresión seria le respondió -Si, en que puedo ayudarlo?-

Continuó sonriendole al chico, con una expresión de galan en su rostro, lo miró un poco y luego prosiguió a hablarle.

-Disculpa que te moleste, pero necesito hacerte una pregunta muy importante si no te molesta claro...puedo sentarme?- preguntó luego de manera educada y sin cambiar su expresión.Haciendo ademán de tomar asiento frente al jovencito.

Lo miro algo extrañado y a la vez intrigado al escuchar que quería hacerle una pregunta importante, pero que clase de pregunta ya que el rubio no lo conocían y nunca antes se habían visto -Esa era la pregunta tan importante que me quería hacer? bueno si es esa, mi respuesta es claro que puede sentarse..... pero sin no era esa la pregunta, puede hacerme esa pregunta tan importante para usted- respondió amablemente con una pequeña sonrisa dibujada en su rostro.

Rió un poco a causa del comentario del menor y tomó asiento frente a él, siempre dedicándole una cálida expresión.

-My name is Anthony Jones, it's a pleausure too meet you...-comenzó por presentarse. - Represento a la ciudad de Las Vegas, en los Estados Unidos de América, y actualmente soy dueño de un casino allí...-continuó con la explicación.

-En el casino, ofrecemos shows en vivo los fines de semana-entrelazó los dedos de sus manos y continuó hablando con un tono calmo y suave.-En cuanto te ví, no pude evitar pensar en que eres parte de algún espectáculo u obra de teatro, y por eso, me interesaba saber si mis sospechas son acertadas, y preguntar que tipo de espectáculo ofreces, talvez para que des alguna presentación en mi casino...-terminó de hablar y se quedó igual de sonriente en espera de la respuesta.

(perdona mi inglés malo x'DUu)

El pequeño lo escucho atentamente pensado "Tsk...Que arrogante, no me importa si es dueño de un casino o de todos lo que hay en las vegas" hasta que escucho finalmente la propuesta de americano, abrio enormemente lo ojos y no pudo evitar echase a reír como loco,ya que era la primera vez que alguien le ofrecía trabajo por su forma de vestir y la verdad no le incomodo que hiciera ese comentario ya que estaba de buen humor, tal vez si lo hubiera hecho un día que no estuviera de humor, lo hubiera demandado por ofrecerle trabajo a un menor en un lugar de perdición.
-Discúlpeme, sir Anthony- dijo entre risa tapándose la boca tratando de calmarse, hasta que por fin lo logro.
-En verdad me disculpo con usted ya que sus sospechas son erróneas, no doy ningún espectáculo y la verdad no me interesaría dalo en su casino ni en ningún otro- comento sonrientemente sin apartar la mirada del rubio

Observó algo confuso cuando el chico comenzó a reírse, repasó lo que le había dicho y no encontró nada que fuera motivo de burla, hasta que escuchó que sus suposiciones estaban erradas, se desilusionó bastante ya que era una buena oportunidad para ofrecer un show nuevo en el casino.

-Oh..I..I'm so sorry....- se disculpó ante él e hizo una leve reverencia con su cabeza. -Me apena demasiado el haber pensado eso de tí, podrías disculparme?-continuó, y es que de verdad se sentía apenado e incómodo en ese momento.

-Entonces creo que regresaré a mi mesa, ofrezco mis disculpas nuevamente...- cuando se iba a poner de pie para regresar a su mesa, el mesero llegó con los pedidos de ambos y al verlos juntos, los dejó sobre la misma mesa.

-No tengo por que disculparlo, lo que dijo no fue ninguna ofensa para mi, al contrario es un alago que usted quiera que yo trabaje en su casino- comento con una enorme sonrisa que luego borro al escuchar que al rubio decir que se retiraría a su mesa así que antes de que este se levantara dijo apresurado
-Sir Anthony, para mi seria todo un honor que me acompañara, ademas si me acompaña ninguno de los dos estaría solo-
pero se sintió mas aliviado al ver que el mesero dejaba los pedidos en la misma mesa, ahora solo esperaba que el rubio aceptara quedarse en la misma mesa.

Aunque estaba realmente avergonzado, sería de muy mala educación el irse ahora que el menor le había pedido que lo acompañara, mucho más si se llevaba su pedido para la otra mesa, y ya no quería más situaciones incómodas de ser posible.

-Ok, me quedaré aquí entonces-se acomodó en su asiento y con un gesto agradeció al mesero el cual se retiró de inmediato.

-So..what's your name?- preguntó ya recuperando su anterior confianza y sonriendo nuevamente mietras comenzaba a endulzar un poco su café.

Se emociono al ver que el rubio le haria compañia -Disculpeme por no haberme presentado antes....Mi nombre es Nate kirkland y representa la ciudad de Stratford Inglaterra, es un gusto conocerlo- respondio con una agradable sonrisa tomando suavemente la taza, disgustando asi su contenido, dejandola nuevamente en su lugar se animo a preguntar -Y que lo trae por aqui,lugar sin buillicio y fuera de lugar como lo es la exentricidad de la vegas?-

Esccuchó atentamente todo lo que el otro le dijo, entonces al observar que tomaba de su té, le imitó sorbiendo un poco de su café. Entonces se dispuso a contestar la interrogante del chico.

-Bueno, precisamente esa es la razón, no es bueno para la salud estar todo el tiempo en ese ambiente, prefiero venir de vez en cuando a algún lugar más tranquilo y apartado..-explicó mientras le sonreía con amabilidad y cortaba un trozo pequeño de su pastel, para luego meterlo con delicadeza dentro de su boca.

-Ya veo- dijo sin dejar de mirar la taza y pasando una y otra vez su dedo indice por el borde de esta, pensando por uno momento las preguntas que podia hacerle al rubio o sobre algun tema que no fuera lo bastante aburrido para lo dos -Y aparte de ser el propietario de un casino ¿a que mas se dedica,sir anthony?-

Masticaba tranquilamente cuando escuchó la nueva interrogante del menor, tragó y se limpió la comisura de la boca con una servilleta antes de contestarle.

-Oh well...de vez en cuando también doy mi propio espectáculo... un pequeño show de magia, no soy muy bueno a decir verdad...jeje- rió un poco- también sé tocar el piano...-comentó siempre con una sonrisa amable en su rostro.

"Nunca es magia, solo son trucos de magica" penso lanzando un pequeño suspiro al escuchar las respuesta del americano y recargando su mento sobre su mano expreso con una pequeña sonrisa y un poco emocianado al saber que el rubio sabia tocar un instrumento como el piano.
-Me encantaria ver un dia de estos su show y tambien escucharlo toca el piano, bueno eso si algun dia usted me lo permite-

Tomó otro trago de su café y luego volvió a limpiar su boca de manera agraciada antes de contestarle al menor.

-Sería para mí un honor que fueras a verme, es más, estás cordialmente invitado a quedarte en el hotel el tiempo que gustes...-dijo mientras le sonreía amablemente, dejándo ver una verdadera expresión de galán de hollywood.

-Tómalo como una disculpa por haberte confundido...-agregó al final, antes de que el inglés pudiese negarse a su invitación.

Era la primera vez que un extraño que apenas habia conocido lo invitaba muy amablemente a su casa, se quedo en silencio por unos momento pensando en la palabras del americano
-Bueno viéndolo desde esa perspectiva....creo que no podría rechazar un oportunidad como esta, ademas para mi seria todo un honor asistir... pero.. hay un pequeño problema, señor anthony.. es mi edad-
comento un poco apenado con una pequeña sonrisa fingida sabiendo muy bien que ese no era el único problemas que había si no tambien estaba su hermano, que jamas lo dejara asistir a un lugar como un casino y menos con un de los parientes de come hamburguesas, pero no lo mencionó ya que el pequeño se las arreglaría para asistir.

Pensó tan solo unos instantes antes de contestarle.

-Eso, no es problema, yo soy el dueño y puedo dejar entrar a quien me plazca, además, yo mismo he estado en casinos desde pequeño y no he tenido inconvenientes...-comentó de manera animada, y es que pensaba en que era un hecho irrefutable, al ser el dueño de todo, podía practicamente hacer lo que quisiera.

-Maravilloso,por un momento habia olvidado que usted era el dueño de un casino - expreso un poco emocionado pero aun pensando en como se la arreglaria o mas bien que mentira le diria a Arthur para que lo dejara salir por toda la noche y que como engañar a Will para que no lo descubriera en su pequela he inocente mentira.

-Pero dejemos de hablar de mi...-dijo antes de beber un nuevo sorbo de su café de manera calma antes de continuar.

-How about you?...-preguntó siempre mostrando su alegre sonrisa, para luego comer un nuevo trozo de su pastel mientras esperaba la respuesta del inglés.

-¿Yo?- pregunto extrañado por el cambio tan trastico del tema pero en fin eso era lo de menos -Es una muy buena pregunta, pues soy dueño de teatro donde solo presentamos obras de Shakespeare....tambien me dedico a leer y escribir aunque no soy tan bueno para escribir como Shakespeare, pero hago el intento- comento desviando un poco la mirada hacia el pequeño parque para luego finalizar -Y claro como todo niño, me encanta jugar -

Entonces algo en todo lo que el otro le dijo llamó su atención y no pudo evitar preguntar.

-Después de todo, si presenta obras de teatro entonces...-comentó, ya que el otro le había dicho que no formaba parte de ningún grupo teatral ni nada por el estilo, y ahora le decía que era dueño de un teatro donde presentaban obras de Shakespeare

Al escuchar la interrogante del americano, no pudo pensar que tal vez el rubio allá malinterpretado eso de ser el dueño del un teatro, asi que calmadamente tomo la taza de te y le dio un pequeño trago para después explicarle al rubio lo que para el ingles implicaba ser el dueño de un teatro
-Amo actuar, Señor Anthony… pero quiero quede muy claro, que NO actuó y NO dirigió ninguna de las obras que se presentan en el Royal Shakespeare Theatre, ya que para eso están los actores del R.S.C, a decir verdad el teatro es administrado por la misma compañía de actores ya que según ellos y mis superiores soy muy pequeño e inmaduro para poder dirigir algo de tal magnitud como lo es el Royal Shakespeare Theatre, y por esa simple razón mis únicas responsabilidades como dueño de ese teatro son a portar dinero para alguna remodelaciones, págale a todo el personal que trabaja ahí e ir cada día a ver las mismas obras que ya me sé de memoria- dijo sinceramente esperando que el americano comprendiera su situacion.