Buscando un nuevo drama para el Théâtre (privado)

Se encontraba sentado meditando sobre lo esculturalmente hermosas que eran ciertas naciones del mundo, con sus bellos y torneados cuerpos, angelicales rostros o temperamentos fáciles de amar, cuando caía en cuenta que lejos de pensar todas esas cosas debía ocupar su mente en nuevas y frescas ideas para la Ópera Francesa. Su magnifica casa de la ópera, en la cual se podía apreciar su mágnifico y perfecto gusto estaba siendo desperdiciada, cuando lo más adecuado era compartirla con el mundo, más ya había dado tantas obras La dame blanche, La poupée de Nuremberg y mil nombres francesamente complicados más... pero... aunque no quisiese admitirlo utilizar la misma forma de sobrecargado glamour y peculiar sentido del humor comenzaba a decrecer las asistencias a su recinto del arte. Quizá lo que hacía falta era mirar a nuevos horizontes y o quizá no tan nuevos, debía de admitir aunque no lo haría en voz alta o públicamente, que las historias extremas y desquiciadas que su vecino Anglais había escrito no eran tan malas, seguro se había inspirado en la belleza francesa para lograrlo, no había otra explicación... pero eso se lo debatiría después. Ahora lo que importaba era buscar ayuda para adaptar una de esas no tan descabellada y cejuda historia a sus operas con la gracia y elegancia que merecía para ser presente en su magnífica casa de la opera, obviamente no podía recurrir al cejudo, así que se le ocurrió una genial idea. - Oh oui!!! ¡¡Mademoiselle Gales, sera parfait!!!- Anunció en voz alta importándole muy poco que su exagerada expresión le hubiese sacado un susto a un par de transeúntes casuales, enviando después un cordial y frances mensaje de ayuda.

((sorri si esta raro xDU tome medicinas para la alergia ;3;UU))

Estaba en su casa tranquila cuando de pronto sonó estruendosamente su celular, no mentira, sólo emitió un pitido que no hacía que nada cambiara en el mundo, pero lo que importaba es que quizás era su hermano arthur que necesitaba ayuda, si era así iría con todas las que pudiese para ayudarlo, aunque si no, bueno vería de qué se trataba y luego evaluaría si era factible hacer lo que decía el mensaje...
Cuando lo abrió se d¡o cuenta de que provenía de una peculiar y muy inesperada persona, no era más que el francés del cual su hermano hablaba tan mal, lo más gracioso de todo era que ese mismo frances, que su hermano le contaba que lo hacía quedar mal en todas las ocaciones posibles, le estaba pidiendo ayuda a ella, sí a ella, era lo menos creíble de todo, con su opera, que sabía Gales de opera, y la chica pensó un poco "bueno debe de ser que este tipo necesita ayuda pero para qué la verdad no me interesa ayudarle la verdad es que una persona como él no debería tener problemas con algo como la opera se supone que los franceses al igual que mi hermano son muy buenos cuando se trata de ese tema aunque si lo pienso un poco el francés está decayendo en la calidad de sus operas mientas las de mi hermano está ganando mucha popuralidad debe de ser eso ese pérfido hombre no debe de tener las agallas como para pedirle ayuda a mi hermano a decir verdad yo tampoco le pediría ayuda a mi hermano seguramente se burlaría de mí me trataría pésimo me ayudaría y luego se burlaría más y luego cada vez que me viera me lo sacaría en cara cada vez que lo pienso me dan ganas de dejar esteril a Arthur no entiendo como mi padre no le enseñó modales calma con eso fue culpa de los normandos y esos venían de francia asi que tecnicamente fue culpa del frances pero ahora el frances me pide ayuda y si le ayudo seguramente la calidad de sus obras aumentara según la experiencia que tengo de las obras de mi hermano y con eso mi hermano se pondrá celoso y lo molestaré un poco luego le mentiré al francés y eso hara que sus obras sean muy malas y luego le diré a mi hermano que la mente maestra detrás de eso fui yo y me amara y por fin me pagará las deudas aunque en realidad eso no importa estoy aburrida sin nada que hacer así que mejor le ayudo al hombre" luego de pensar todo eso la galesa le envió un mensaje al fránces diciendole que lo podía ayudar, pero que tenían que encontrarse en alguna parte, y no se le ocurrió ningún lugar así que simplemente le mandó en el mismo mensaje que sugiriera un lugar para que se juntaran...

Y aparentemente estaba saliendo bien, ya que había recibido una respuesta positiva, y claro no había quien pudiese negarse al encanto francés por que cuando un caballero tan elegante pedía ayuda se le debía de conceder. Se sonrío galantemente como si aquella expresión pudiese transmitirse en los mensajes de texto y se apresuro a responder tecleando los botones del celular con solo su pulgar demostrando maestría para manejar ese aparato, lo más adecuado sería un agradable café en París, cerca de la magnífica casa de la ópera. Ya que por mas amable que estuviese siendo la Mademoiselle Gales seguía siendo parte de la familia del cejudo y muy posiblemente no iba a entender la seriedad del asunto hasta que viese con sus propios ojos el más elegante escenario donde quería se llevaran acabo estas producciones. Termino el mensaje con un adecuado agradecimiento y una no tan elegante carita feliz ";D" eso debía darle un toque más personal a todo el asunto. Espero con ansias la confirmación mientras internamente comenzaba a armarse en la cabeza el atuendo que usaría ese día, por que debía lucir elegante, oh si y también hacerse una lista de las posibles obras con las que querría ayuda anotaría algo sobre ese tal señor Shakespierre... ah ya recordaba como se llamaba William Shakespeare, es que esos horrendos nombres eran de más complicado. Esperaba el horrendo cejudo no se enterara de esto, lo que menos quería era tenerlo inmiscuido, de por sí no era nada agradable tener que considerar sus horrendos dramas y ahora que tenerlo que tolerar en vivo sería una pesadilla. Bebió elegantemente lo que sea que tenía a su lado en una copa de cristal, afortunadamente para él era vino y se re-acomodo en su asiento sonriendo a una que otra damisela que pasaba por allí o a algún chico guapo. Finalmente solo le ayudarían a armar uno de esos dramas del modo más francés posible para que fuese digno de presentarse en su casa y quien sabe si su versión era mejor, sería una humillación para el cejudo, esa casualidad sería bastante exquisita.

No se ubicaba mucho en Francia... por lo que estaba un tanto perdida, y un tanto atrasada, eso no le gustaba, pero como ya iba atrasada no le importó mucho que digamos... "por donde era ese lugar que me dijo... espero que mi hermano no se entere de esto, porque si lo hace me va a matar, y dirá cosas como 'cómo le ayudas a ese farsante de segunda?!' o 'no puedes rebajarte al nivel de `ese`' con un tono un tanto despectivo... igual no conozco tan bien a francis, por lo que no lo puedo juzgar aún... sólo he escuchado lo mucho que lo odia mi hermano... creo que mejor le mando un mensaje diciendole que estoy perdida..." acto seguido sacó su celular, y tecleo rapidamente "estoy perdida... no sé dónde, pero estoy en algún lugar cerca de donde me citaste, o eso espero T.T... hay un letrero que no entiendo muy bien, pero es de color rojo C: y al frente hay un café, pero no tiene exterior, dijiste que esperarías en las mesitas de fuera de un café, pero ese no tiene... ayudame!!! T.T" en un claro y desesperado intento de conseguir ayuda... no sabía francés, así que intentaba pedir ayuda en inglés, pero solamente la ignoraban... "mejor será que le envie el mensaje" penso un poco avergonzada... apreto el botón 'enviar' y se quedó allí esperando a que la encontrararn...

Sonreía más de la cuenta en modo de agradecimiento al mesero que rellenaba generosamente su copa de vino, distrayéndose únicamente cuando su celular anunció un nuevo mensaje. Al revisarlo se dio cuenta que se trataba de su invitada especial tan esperada, aparentemente tenía algunas dificultades para encontrar el camino adecuado y esto retrasaría en algo sus planes... lo cual no le agradaba por que podría ser que el cejudo se enterase. -"oh non non... habrá que hacer algo al respecto"- Dijo más para sí mismo mientras que con un ademán elegante despedía al mesero, tomaba la copa en mano y le daba un trago. Se le ocurrió la idea perfecta, como decían 'si la montaña no va a ti, ve tu a la montaña' o algo así recordaba y ya que no podía contar con recibir direcciones, había algo mucho mejor. -"Busca al personal de servidumbre más atractivo que encuentres, pregúntale como se llama, descríbele con lujo de detalle y dile que yo pido 'lo de siempre' oui!"- Texteo con la mayor agilidad y rapidez posible que podía una persona con una sola mano, ya que no iba a abandonar su copa de vino con aún una generosa ración. La razón de esta petición era que como buen conquistador conocía a todos los personales de servicio de todas las cafeterías de kilómetros a la redonda y jamás olvidaría donde encontrar un espécimen excelente para una cita apasionada. Espero pacientemente el mensaje, seguro si se trataba de la amigable rubia de pronunciado escote sería el café que esta más hacia el centro, o quizá era ese otro donde había un sonriente pelirrojo de prominente trasero rumbo al arco del triunfo...

(perdón por la demora ;__; la inspiración y el tiempo fallaron abismalmente a mis propósitos >__>)