Tienda de juguetes. [ Máx. 4 personas.] [ Libre~]

Ese verano en especial era particularmente caluroso. Por las calles no había rastro de personas, pues el pavimiento ardía y parecía amenazar con derretir la suela de los calzados. Todo el mundo estaba disfrutando o bien de la playa o, por otro lado, de los placeres de la piscina.

Por todas partes había carteles de la "Super pistola de agua. Última novedad. ¡Cómprala ahora y refréscate mientras juegas con tus amigos!"

El dichocho juguetito estaba anunciado hasta en la maldita sopa. Y había llegado a un extremo que la idea de comprarlo se había vuelto casi una obligación.

-"No debe de ser demasiado caro si tantas personas lo tienen... ¿ Verdad? " - Pensaba Daniel de camino a la juguetería que siempre había visto pero en la que nunca había entrado. Y eso que no estaba muy alejada de su casa.

Como había supuesto estaba abierto. Por los ventanales que dejaban ver a las personas de fuera los juguetes del interior, estaba colgado un póster de la pistolita de agua. Esperaba que no se hubiera agotado, pues entonces tendría que ir a una tienda de esas que estaba mucho más alejada.

Dani entró con poco cuidado en el establecimiento. Haciendo resonar la campanita de "llegada" con bastante violencia, pero adornando el sonido con una sonrisa amigable.

Algunos pensarían que era vergonzoso comprar un artilugio de niño cuando eres un adulto. Pero para el húngaro, no había nada malo en hacerlo. Al fin y al cabo podría fastidiar a Prussia o a Rumania.

- ¡Buenos días! - Dijo observando los estantes con gran variedad de juegos infantiles.

sus dichosos dioses eran un grupo de perezosos. Jamas hiban a la tierra. Y su ego se desbordaba a borbotones de ellos. Pero aun asi daria todo por ellos. De alli que se encontraba en la tierra. Dando vueltas por todos lados. Se dirijio a un lugar donde habian varias tiendas. Atenas le habia pedido una crema antiarrugas... Era una diosa. No necesitaba crema antiarrguas!!!
Se distrajo debido a un anuncio. Una pistola de agua.- de esas tambien se fabrican aqui???- se pregunto a si mismo a la tienda.
Estando alli vio como entraba un cjico haciendo el escandalo que a el le gustaba evitar.
En respuesta al buenos dias del chico ssolo sonrio.
Y siguio buscando la pistola.