Esta familia: ¿asi o mas rara? (privado y Advertencia: gore incesto y no se que tanto XD)

Se sentía demasiado fenómeno ahí, el hecho de nisiquiera saber cuidara un bebe le aterraba, además de que viendo aquel lugar se daba cuenta de que su casa no tenía comparación, apenas y contaba con 5 habitaciones, una sala comedor y una cocina... Y cuando aslan iba no salían gracias a la inseguridad, o a que andaban cumpliendo otras necesidades, hecho un suspiro y le siguió calmado, a pesar de que el aumento la velocidad fue fácil dar con el y entrar al mismo cuarto

Un cuarto de forma simple y cuadrada pero no pequeño, al frente un enoirme ventanal desde donde se podia ver la playa que comenzaba a pies de Cair Paravel, unos cuantos estantes grandes con puertas de vidrio que dejaban ver dentro varios instrumentos, flautas, panderos, liras, ocarinas, clarinetes, casi todo de viento pero al centro rtesaltaba un hernoso piano, muy grande y rustico, brillante y muy bien cuidado, el fauno cerro la tapoa del piano y prandose en el banquillo se apoyo para subir al el pisando en el proseso las teclas y asiendolas sona.

-siempre eh querido hacer el amor en este piano n,nj

Se acomodo sentadito en una orilla y sonriendo, queria olvidar las preocupasiones, que la verdad eran absurdas y paranoicas.

sonrió ante sus palabras y fue a su lado- en verdad te gustaría?- comenzó a tocar la canción de " fur elise" de beethoveen, amaba los pianos pero nunca tuvo uno, el practicaba con un libro y un lienzo pintado de teclas

awwwwwwwww >w< que lindo, me dio cosita Vik ;n;
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Se recosto en el pieno pra mirarlo y escuchar como tocaba, sabia que Victor tenia tambien muchos dones y adoro que a musica fuera uno de ellos.

-sipi... pero prefiero seguir escuchando como tocas n,n

asintio y siguio tocando hasta terminar, vio los demás instrumentos, de los cuales solo sabia la teoría y muy poca practica

- tienes un cuarto estupendo...- se aserco a besarlo

resivio el beso muy relajado por la hermosa piesa musical que acababa de escuchar.

-no es mi cuarto amor... es del castillo en general, pero me gusta mucho la musica y por eso me la paso aqui n,n

-Es tu palacio... es tu cuarto-esa era su logica aplastante-

El solo veia las cosas asi, pero le sonrio, se sentia como ahi

No vio motibo alguno para contradecir lo que el mayor dijo, en realidad esa logica sono muy convincente, se acerco gateando sobre el piano y lo miro a los ojos, le gustaban esos ojos grises.

-si n,n creo que tienes algo de razon amor... ¿quieres tocar algo mas?

Miro todos los instrumentos a su alrrededor, Victor tenia un cuartolleno de instrumentos que podia tocar si asi lo deceaba.

-yo conosco piezas humanas basicas =D podriamos tocar algo juntos

Por su parte Sam se las ideaba para fastidiarle la existencia a su queridisimo Rubio, se las ingenio para llevarlo a la biblioteca, ese cuarto empolbado de que durante años habia sido testigo de un monton de locuras, si esas paredes hablaran ¿cuantas historias narrarian?

-¿recuerdas este sitio?... si no lo recuerdas es que de plano estas imbesil u_u

Se acerco al escritorio de madera que adornaba el centro de la biblioteca y derribo sin delicadeza un monton de pilas de libros que descansaban sobre el, se sento en el cruzando una pierna sobre otra (bien gay XD)

-recordarlo? claro que lo recuerdo idiota...

Se estremesio un poco de verlo, no lo podia negar con eso le guardaba cierto odio a sam, no porque fuera lo peor... sino porque el recordar toda la impotencia de no poderse defender le afligia

-Fuiste un despota...- lo dijo mas bien bajo, para si mismo

Escucho la palabra "despota" y se also mas que la punta de una montaña, en sus ojos se veia lo orgulloso que era.

-¿solo eso? ... me han dado peores descripciones... tu fuiste tonto, precoz y un lloron...

levanto la barvilla pero lo miro de reojo para captar su reaccion, esperaba para su propio deleite que el rubio se ofendriera, pero de no hacerlo le daria igual. Aun asi, por dentro algo le saltaba en el corazon de podewr volver a verle.

Le vio un poco molesto, pero no perdería la calma en aquel momento, el recuerdo le causaba cierto malestar, odiaba ser débil... o que se le Viera débil... incluso el único que lo había visto llorar era samael, y le provocaba humillación

- Estaba hebrio, era mi primera ves... y eres un desgraciado... eso fue todo... entendido?

Desde que se invenatron los pretextos... se acabaron los pendejos ...

Camino asia el con una sonrisa nada agradable en los labios y mirandole arriba y abajo.

Le dio la espalda, se sentía raro con el, se sobo sus brazos, para después ver y desempolvar unos libros

- para que me tragiste, samael?

sabia de antemano que todo lo que el rubio haciera era solo para distraerse, se daba una baga idea de que era aquello de lo que se distraia y sentia algo de gracias al respecto.

-¿para que te gustaria a ti que te alla traido? >)

Lo pregunto sabiendo que le causaria aun mas incomodidad, y si bien el ruso disimularia, el satiro seria capaz de sentirla.

- Para... para fastidiarme como de costumbre...

Sabia que había algo mas pero se evadió y se sentó revisando los libros con total indiferencia... aun no sabia como sentirse seguro con el

Se relamio los lavios avanzando aun mas lento pero directo asia el, sus intesiones eran nada mas y nada menos que molestar, era verdad.

-si... justo eso, pero existe todo un mundo de posibilidades para fastidiar...

Le vio de reojo, y de su abrigo saco una botella- mmm... vodka...- dio un trago y volteo a ver como se asercaba

miro la botella, no era que las bebidas alcoholicas humanas fueran mejores que las de su mundo, pero sin duda eran algo nuevo, se deslizo asta quedar pegadito a el, con la mirada sobre la botella.

-¿me das?

Si le deci que no lo mas probable es que se la quitaria.

- No... no te dare... es mia!

Se dio la vuelta dando un gran trago, un poco salió por su labio, pero se limpio de inmediato- bueno... te daré solo un poco...- le ofreció

Cuado se le negó la bebida arqueo la ceja levemente ¿Cómo se atrevía el rubio a decirle no? ¿Acaso necesitaba un poco mas de disciplina? Para cuando el rubio se decidió a compartir de su botella Sam ya había tomado una decisión, darse a respetar pero era una mus retorcida idea de respeto la que el fauno tenía.

-no, no serta un poco… un poco no vasta, no para mi…

Se metió el dedo índice a la boca y lo lamió de forma seductora y con ese mismo dedo señalo a Shurik con una expresión de malicia que solo el era capaz de hacer, un rayito azul y el ruso media ahora poco mas que Aslan.

-¿deyabu?

Se vio de aquella estatura y su primera reacción fue ir hacia atrás, diferentes recuerdos le abrumaron y una lagrima de coraje salió- no te atrevas... - tomo fuerza y apretó los puños, se contuvo de llorar y corrió a el golpeandole levemente- no lo hagas... Por que me haces esto a mi?!- dijo con cierto rencor por la ultima ves

Miro todos y cada uno de sus movimientos y los analizo, de una manera enfermiza los disfruto, tanto el miedo como el rencor, de alguna forma degustaba ser odiado, pero en el caso del rubio quería ser odiado y amado al mismo tiempo, le pareció tan mediocre su intento de atacarlo pero también se veía lindo, le tomo de ambas muñecas para detenerlo y hablo.

-no hagas eso que te ves re marica =.= ¿que no eres un hombrecito?

Se agacho un poco, lo suficiente para verle a los ojos, su mirada no seria capaz de expresar nada aunque lo deseara hacerlo, había perdido esa habilidad o mas bien jama la había tenido, le beso suavemente y después le dedica una mirada igual de fría y profunda, pensaba en tantas cosas que no comprendía, que el rubio había sido capas de despertar en el y sin embargo no podía expresar.

-si lo are… ¿y por que tu?

Quizá se pregunto así mismo por que Shurik, le rodeo la cintura y lo empujo asta el mismo librero donde lo toco por primera vez.

-tu…porque me atraes mucho, con muchos se me pone dura, pero solo tu haces esto

Le tomo la mano izquierda al otro y se la acomodo sobre su propio pecho al nivel del corazón, el corazón de Samael latía con fuerza y muy rápido.

Le correspondió el beso, aunque le dolía sus miradas, se sentía terriblemente usado, era lo que no perdonaba, recordó como la primera ves lo acorralo en aquel librero y una lagrima le salió al recordarlo, desvío la mirada, hasta que sintió que tomo su mano, poniendola en el pecho de el, escucho su explicación con atención y se sonrojo alsando la mirada- n...no mientas... no mientas- se sujeto fuertemente a las ropas de el, y lloro un poco mas, recargo su cabeza en el pecho de el-

Escuchaba como lloraba y se medio mordió la lengua para no soltarle un montón de palabras hirientes en burla, cuando por fin se canso de esperar lo azotó contra el librero, sosteniéndole ambas manos sobre la cabeza, una sola mano de Sam basto para esa tara y de nuevo se acerco a mirarlo a los ojos, deseaba ser capas de ver en ellos que era lo que el ruso recordaba de la vez pasada.

-no te miento idiota malagradecido…

Jamás seria un ser de fiar, el mismo no se tendría confianza, aun así quería que confiara en el. Tanto mirarlo de frente hacia que notara cada detalle, en ese momento lo que mas resaltaba eran sus labios, suaves y de color atractivo, así que volvió a besarlo, un beso rudo y forzado, un beso que no necesitaba permiso para durar, esos labios sabían aun mejor de lo que lucían, le mordió el inferior solo un poco y después se separa para dejarlo respirar.

-¿que necesitas para creerme?

Sonaba tan falso que quizá no le creería, pero el tono cínico e hipócrita era ya su tono propio, no tenia otro.

Le había plantado la mirada, no podoa evadirse de lo que paso aquella ovación, en la que lo tenía en una confusión horrible, fue su primera ves, y era lo que mas recordaba, nunca se había imaginado que seria tan dolorosa, el no había querido aceptarlo, pero de un modo retorsido el sátiro lo había atraído; recibió el beso que en un inicio rechazo por la brusquedad, perl termino aceptando, y le gusto que le mordiera, ya cuando se Alejo exigió aire, estaba muy agitado-

Por favor... Escuchate... Quieres... Quieres que te crea??? Que pretendes... Que quieres de mi??- Se le quedo viendo algo molesto, sentía que le mentía, pero lo que mas deseaba era creerle, e incluso amarle, desvío la mirada, y mas que esperar una respuesta se preparo para unas groserías