No seré tu uke! (privado) [advertencia]

no sabía por qué, pero ultimamente muchas personas iban a visitar su casa, y en todas, sí, todas, terminaba siendo dominado por otro.

estaba pensando en lo raro que era todo eso, mientras salía a la puerta de su casa a barrer un poco.

(esta es la mejor porquería que puedo hacer cuando estoy seca, lo siento mucho de veras, hidan-chan u_u)

(gracias :3)

desde hacía unos metros se veía un flamenco rosadamente gay acercandose.... espera... no, era dario. es decir, tenía que ser dario, pues el color de sus ojos era diferente y le recordaba al de cierto pederasta....

-eh...? dario... hola, qué haces aquí...?-definitivamente, la educación no era uno de sus puntos fuertes, tampoco la hospitalaridad.

dejó la escoba a un lado para ir a ver mejor al chico.

(uhhhhh.... lo mató xD)

de verdad no se esperaba eso, qué era lo que estaba pasando? de donde ese chico había sacado esa fuerza?

-de qué hablas?!-le tomó el pie y lo hizo caer al suelo junto a el.

tenía los labios llenos del sabor del hierro, y hasta se los relamía con ganas, definitivamente no dejaría que ese niño le hiciera todo eso.

sintió un agudo dolor en su brazo, para después quedar casi inmovilizado cuando el menor le ató con la bufanda. le pateó nuevamente, esta vez n el estomago, para que cayera.

-así que es tu amante...?-sonrió con maldad, le divertía la reacción del chico.-para tu información, no es como si lo hubiera obligado, él mismo quiso eso.

le pateó ahora en la mano, para que su navaja cayera.

-y qué pasa entonces con tú y Al? acaso no hicieron lo mismo?-le miraba de la misma forma en que el menor lo hacía, aún no había olvidado del todo ciertas cosas.

comenzó a forcejear un poco con las manos, logrando desatar una mano y con ella descargando un fuerte golpe en la mejilla del moreno.

(en serio me lo quieres matar, hidan O___O)

estaba por negarle lo que había dicho, cuando sintió un dolor horrible y punzante en ambas manos, miró y se sorprendió con toda la sangre que fluía de ellas, su primera reacción fue gritar del dolor, le era insoportable.

-maldito...-comenzó a respirar profundamente, tratando de acostumbrarse al dolor.-y tú qué? que no estás haciendo toda escenita por tu novio?-inquirió, ahora con una mirada divertida, tratando de esconder el dolor.-ahh... coalt... ma-más fuerte... ahh...!-fingió gemir, divirtiendose para sus adentros y con una sonrisa burlona en sus labios.

(pero de todas formas me gusta xDD)

sentía nuevamente el gusto de la sangre en su boca, talvez se había pasado con la broma, pero era su venganza por lo que había hecho. ahora que no tenía la bufanda ocupando sus manos, intentó levantarlas para golpear nuevamente al menor. terminó en un grito agudo sofocado por la bufanda, no podía ni siquiera mover sus manos un centimetro sin que sintiera un dolor que era capaz de hacerlo desmayar.

-mhh... mhhh...-fue lo único que salió de su boca.

(seeeeh *0*!!)

no dudó en darle un rodillazo en el estomago del menor, para tirarlo al piso y juntar todas sus fuerzas y sacarse la bufanda de encima.

-entonces qué te debería hacer a ti por lo que hiciste con Al?-sabía que por lo menos en eso tenía la razón, se acercó un poco al chico para verlo con una sonrisa maliciosa.-de todas formas, no te creas que fui el único en hacerlo...-estaba seguro que Coalt no solo había hecho ese tipo de cosas con él y el pequeño.

otra vez estaba en el suelo, se preguntaba cómo había llegado ahí cuando sintió como era despojado de su ropa y que algo frío se abría paso en su interior. miró abajo y no pudo dejar de sorprenderse.

-... eres un enfermo...-murmuró, tratando de aguantar los gemidos que querían desesperadamente salir de su boca.

-pues intentalo.-le dijo desafiante, aunque no le duró mucho antes de que comenzara a gritar por el corte que el chico le hacía en su torso.-y-ya basta...!

ahora estaba algo sonrojado al sentir el arma todavía adentrandose más en su interior, pero no emitía ningún gemido o suspiro, no le daría tan facilmente la victoria al mexicano.

ya no aguantaba más, no dejaría que el moreno le hiciera todo eso. apretó su mano derecha con fuerza, no sin jadear un poco por el dolor, y le golpeó en el estomago otra vez.

-creo que te faltan unos años para que yo te suplique.-le dijo de forma obstinada, mientras trataba de hundir más su puño.

no pudo evitar dejar escapar un pequeño gemido casi inaudible, enseguida se mordió el labio inferior, a pesar de que se le hacía dificil, pues ya lo tenía muy lastimado y haciendo eso solo salía más sangre.

-cuándo me vas a soltar...?-preguntó casi en un grito, cuando el alcohol comenzaba a entrar en sus heridas y empezaba a arder.

-m-me duele...!-gritó, cerrando los ojos con fuerza al sentir como era lastimado en su interior a causa de la navaja y la pistola.

al sentir los labios del mexicano sobre los suyos pensó en darle un manotazo, pero a causa de los dos tiros en sus manos era incapaz de moverlas, por lo que se conformó con alejar su rostro lo más que podía.